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ISSN 1576-2068
Dep. Legal M-10186-2000
Número 76
Octubre-Diciembre 2018
REVISTA DE LA FEDERACIÓN ESPAÑOLA DE GENEALOGÍA Y HERÁLDICA
Y CIENCIAS HISTÓRICAS
EDITORIAL
N O TA S L E G A L E S A C E R C A D E L A H I P O T É T I C A
R E V O C A C I Ó N D E L O S T Í T U L O S F R A N Q U I S TA S
Vuelven a la actualidad política las Grandezas de España y los Títulos del Reino concedidos,
entre 1948 y 1975, por el Generalísimo Franco como Jefe del Estado, más bien Regente, de una Monarquía votada por la inmensa mayoría del pueblo español en el
referéndum del 6 de julio de 1947.
No fueron muchos, a decir verdad,
porque el Caudillo y su régimen eran
muy cuidadosos a la hora de premiar
a los ciudadanos más preclaros. De
hecho, fueron exactamente 40, como
nos aclaró en las páginas de estos
Cuadernos de Ayala, en el número
41 (enero-marzo de 2010), el erudito
don Rafael Fantoni y Benedí.
A saber: los Ducados de Badajoz, Cádiz, Calvo Sotelo, Carrero
Blanco, Mola y Primo de Rivera (todos ellos con Grandeza); los Marquesados de Alborán, Bilbao Eguía, Casa Cervera,
Dávila (con Grandeza), Kindelán, Queipo de Llano,
Ramón y Cajal, Saliquet, San Leonardo Yagüe, Santa María de la Almudena, Somosierra, Suanzes, Varela de San Fernando, Torroja y Vigón; los Condados del Alcázar de Toledo (con Grandeza), Arruga,
Arteche, Bau, Benjumea, Castillo de la Mota, de la
Cierva, Echeverría de Legazpia, El Abra, Fenosa,
Jarama, Labajos, Maeztu, Martín Moreno, Pallasar y
Pradera; la Baronía de Camporredondo; y la Grandeza unida al Condado de Rodezno; y la Grandeza
sin Título dada a don Fernando Suárez de Tangil y
Angulo.
Notemos que entre esas mercedes no se
cuenta, como mucha gente cree, la del Ducado de
Franco, con su aneja Grandeza de España, ya que
esta no fue otorgada por el Caudillo recién fallecido
entonces, sino por el Rey Don Juan Carlos, con fecha del 26 de noviembre de 1975. La agraciada fue
su hija doña Carmen Franco Polo (1926-2017), porque la hija del dictador tuvo una actuación decisiva
en los primeros días del reinado de Don Juan Carlos, al poner a su disposición y del Gobierno el tes-
tamento político de Franco, en la que se exhortaba
a todos los españoles a ponerse al lado del nuevo
Rey, facilitando así la transición política. Parece obvio que esta señora no participó en ninguna acción
de las que la socialdemocracia imperante considera, con su habitual sectarismo y su habitual realidad paralela, como crímenes franquistas. El
mismo sectarismo y la misma fantasía politically correct que lleva a los
izquierdistas hispanos a defender lo
indefendible en términos históricos:
que la segunda república española
fue un régimen democrático, inocente y virginal.
Este sectarismo es el que ha
movido a algunos sectores de izquierdas –tan demócratas como los
filoetarras vascos de Amaiur-, a solicitar la revocación de todos esos Títulos nobiliarios, a partir de 2015.
Pues bien, el Gobierno presidido por el socialista don Pedro Sánchez, nacido de una moción
de censura el pasado 1º de junio, ha mostrado enseguida un gran interés político en intensificar la
persecución contra los antiguos políticos de la época franquista (muy pocos ya con vida), pero sobre
todo contra los símbolos, recuerdos y memoria de
aquella época, que concluyó hace exactamente 43
años, casi medio siglo. El asunto es, como se ve,
verdaderamente urgente, ya que quita el sueño a la
mayor parte del honrado pueblo español. En fin.
El asunto político está bien claro, pero no lo
está tanto la posibilidad legal de llevar a cabo la revocación que se intenta. La legislación vigente, en
particular el real decreto de 27 de mayo de 1912, no
incluye ningún procedimiento legal para tal acción
revocatoria –más bien abolitoria-.
Notemos, antes de proseguir, que la revocación por S.M. el Rey, en junio de 2015, del Título de
Duquesa de Palma que hasta entonces poseía su
hermana la Infanta Doña Cristina, no sirve de prece-
NUESTRA PORTADA
Grabado que representa un modelo de árbol genealógico de consanguinidad
tomado de una enciclopedia española del siglo XVIII
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dente legal, toda vez que se trataba de uno de los
denominados Títulos de la Casa Real, cuya legislación aplicable es otra distinta de la del común de las
mercedes nobiliarias hispanas. El real decreto
1368/1987, sobre régimen de títulos de la Familia
Real, no integra ninguna disposición para la privación directa de una de esas mercedes, pero sí que
lo autoriza su artículo 6º, al expresar que el uso de
títulos de nobleza, pertenecientes a la Casa Real,
solamente podrá ser autorizado por el Titular de la
Corona a los miembros de su Familia.
La atribución del uso de dichos títulos
tendrá carácter graciable, personal y
vitalicio. Al tener ese expreso carácter
graciable, si cesa la gracia regia, cesa
también el uso y atribución de la merced.
Nosotros consideramos que,
en términos legales, el que la posibilidad de revocación no esté explícitamente incluida en el real decreto de
27 de mayo de 1912, ni en la legislación nobiliaria atinente y concordante,
previa o posterior a aquella norma, no
puede ser óbice para que se pueda
decretar la supresión de una merced.
Para empezar, porque según el principio romano de
contrarius actus, y el principio justinianeo de que
quien puede lo más (crear o dar sucesión a una
merced), también puede lo menos (revocarla o suprimirla). La concesión de una merced nobiliaria es
siempre graciable, aunque no lo es la mera sucesión
en su goce, que es un acto administrativo reglado, y
sujeto al pago de impuestos.
Pero es que, por otra parte, la Ley de 4 de
mayo de 1948, por la que se regulan todavía las
concesiones y las sucesiones de Títulos nobiliarios
en España, sí que prevé la posibilidad de privar de
una merced nobiliaria al poseedor legal que haya sido condenado por la comisión de delitos o por observar una conducta indigna, habiendo recaído una
condena firme. Porque su artículo 5º establece que
el Jefe del Estado podrá acordar la privación temporal o vitalicia de aquellas dignidades nobiliarias cuyos legítimos poseedores se hayan hecho personalmente indignos de ostentarlas; aunque en tal caso,
la Grandeza o Título quedará vinculado en la familia
con arreglo al orden de suceder establecido en las
Leyes –es decir, que no se puede suprimir el Título,
sino solo privar de él al indigno, pasando la sucesión a otro familiar-.
Y el reglamento dictado para el desarrollo de
esa ley, aprobado el 4 de junio de 1948, en su artículo 7º, señala que la respectiva privación, temporal
o vitalicia, será acordada por el Jefe del Estado, a
propuesta del Consejo de Ministros, previa formación del correspondiente expediente, que se iniciará
de oficio por el Ministerio de Justicia, en el que habrá de ser oído el interesado, y podrán informar la
Diputación de la Grandeza y el Consejo de Estado.
Que nosotros sepamos, tal norma estuvo a
punto de aplicarse a un duque condenado por injurias al Rey en 1977; a un marqués y general de los
golpistas de febrero de 1981; y más tarde a un marqués y Grande condenado por narcotráfico.
Y el caso es que la Ley de 4
de junio de 1948, establece en su artículo 1º, que la creación de Títulos y
Grandezas es una competencia propia y exclusiva del Jefe del Estado –
del Rey-, con el refrendo del ministro
de Justicia, que, si bien es obligado,
en este caso es más bien de cortesía.
Mientras que el artículo 62,F de la vigente Constitución reserva formalmente al Monarca la facultad de expedir los decretos acordados en el
Consejo de Ministros, conferir los empleos civiles y militares y conceder honores y distinciones con arreglo a las
leyes. Aunque todo ello legalmente dependa de la
voluntad del Gobierno –las Órdenes y condecoraciones se otorgan por este, autónomamente, aunque
en nombre del Rey-.
Es decir, que la posibilidad legal de revocación o supresión de una merced nobiliaria existe de
una manera bien neta: pero está reservada al Rey
como Jefe del Estado, pues queda a su entera decisión de una manera propia y autónoma, en la que el
Gobierno no puede intervenir porque carece de esa
facultad legal. Y cualquier decisión que tomase al
respecto el Rey, en un sentido o en otro, resulta que
sería perjudicial para su imagen simbólica, para su
función moderadora y para su imparcialidad –porque
la voluntad política del actual Gobierno tiene buen
número de partidarios, es cierto, pero no es menos
cierto que también muchos ciudadanos se oponen a
ella-.
Y aquí hemos de considerar otro aspecto de
este trance que busca el Gobierno, cual es el de la
colisión entre la normativa del Antiguo Régimen, de
los Regímenes liberales y del Franquismo, con la vigente Constitución Española de 1978. Una colisión
de normas que ya venimos denunciando desde hace
años en estas páginas de los Cuadernos de Ayala –
por ejemplo, en el número 13, de enero-marzo de
2003-. Decíamos ya entonces que, durante muchísimos años, la aplicación de estas normas de 1912 y
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de 1948 no ha suscitado apenas cuestiones legales,
a pesar de que el larguísimo periodo de tiempo en
que han estado vigentes ha provocado que algunos
de sus artículos hayan quedado obsoletos o sean
de dudosa aplicación. Se trataba, en todo caso, de
una legislación que regulaba un procedimiento administrativo especial, y punto.
La promulgación de la Ley 30/1992 y su sucesora la Ley 39/2015, de Régimen Común y Procedimiento Administrativo de las Administraciones Públicas, ambas igualmente votadas
en Cortes, y que regulan desde hace casi treinta años todos los procedimientos administrativos, han venido a
complicar las cosas al Ministerio de
Justicia. Estas dos Leyes han procurado y procuran adecuar el funcionamiento de la Administración Pública
a las pautas de comportamiento democráticas, y se han preocupado sobre todo por la defensa de los derechos del ciudadano en su relación con
los administradores y funcionarios del
Estado. En este punto la vigente Ley es
muy escrupulosa, y ciertamente sirve de protección frente a los frecuentes casos de abuso de
poder que a diario produce una Administración Pública de enorme tamaño y de escasísimo control disciplinario sobre sus millones de empleados, por la
que a veces –más de las deseables- pululan funcionarios de esos que están convencidos de que el Estado es suyo y que el ciudadano es un mero incordiante al que hay que parar los pies.
Pues bien, sin embargo de que hace ya casi
treinta años que la Ley 30/1992 y la Ley 39/2015
están vigente, y sin embargo de que en sus articulados han dejado y dejan bien claro que su ámbito de
aplicación comprende a toda la Administración Pública, y a toda clase de procedimientos administrativos, con excepción de los pocos que define como
especiales, es un hecho que el Ministerio de Justicia
se niega a aplicar esas disposiciones a los expedientes de sucesión y rehabilitación de Títulos nobiliarios, ignorando que la norma en vigor tiene un
rango jerárquicamente superior al del real decreto
de 27 de mayo de 1912, y que es posterior a la Ley
de 4 de mayo de 1948, superando a ambas. El Ministerio de Justicia alega para obrar así que el procedimiento de sucesión y de rehabilitación de Títulos nobiliarios es un procedimiento especial, al que
no afecta para nada la Ley 39/2015. Esto no es cierto. Aun admitiendo que pudiéramos estar ante un
procedimiento especial, lo que es como poco muy
dudoso, resulta que la Ley 39/2015 establece que
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en tales casos sus disposiciones se apliquen a las
actuaciones administrativas comunes, como lo son
las formalidades de las notificaciones, el cómputo
de los plazos de presentación de documentos, de
los plazos de información -ni la Diputación de la
Grandeza ni el Consejo de Estado los cumplen casi
nunca-, de los plazos que se conceden para completar un expediente, etcétera.
Nada de esto observa, aplica y cumple hasta
ahora el Ministerio de Justicia, ignorando así,
por cierto, con contumacia, el cumplimiento
de una Ley votada en Cortes, y provocando una colisión legal que produce
muchos y graves problemas a los ciudadanos que ante él acuden en demanda de sus derechos sucesorios
en materia nobiliaria.
Volviendo al hilo de nuestro
escrito, que es el de la posible revocación o cancelación de Títulos o
Grandezas, creemos que una posible
solución sería que el Gobierno, cuando
goce de una mayoría suficientemente representativa de la voluntad del pueblo español –porque de momento este Gobierno no
tiene mucha legitimidad democrática, al no haber sido votado en unas elecciones generales-, constitucionalice aquellas normas tan antiguas –el real decreto de 1912, la ley de 1948, y otras tantas-, y tome
per se, y sin involucrar al Jefe del Estado, la decisión que se acomode a sus tendencias político-nobiliarias. Y es que ya el primero lo preveía, en su artículo 2º, al establecer que cuando para premiar
servicios extraordinarios hechos a la Nación se trate
de conceder una Grandeza de España o un Título
de Castilla, bastará el acuerdo del Consejo de Ministros. Luego su supresión o cancelación podrían
nacer del mismo órgano gubernamental.
De ese modo, la concesión, sucesión o supresión de los Títulos y Grandezas –máximos honores en la Monarquía española- pasaría a ser una
competencia directa del Gobierno a través del Ministerio de Justicia -es decir, a la Administración Pública civil, la misma que tramita desde siempre los
expedientes administrativos de sucesión o de rehabilitación de aquellos y aquellas-.
Como bien ha señalado recientemente don
Agustín Ruiz Robledo, esta sería la mejor manera
de cumplir en el Derecho nobiliario la máxima de la
Monarquía parlamentaria que ya rige en todos los
demás ámbitos del Derecho: el Rey reina, pero no
gobierna. Y quedaría libre de compromisos o de coacciones de índole política o partidista.
Dr. Marqués de la Floresta
DE RE NOBILIARA
ÁVILA DE LOS CABALLEROS Y DE LOS SANTOS
por D. Alfonso de Figueroa y Melgar, Duque de Tovar
A veinte leguas de Madrid, en la Vieja Castilla que hace a sus hombres y los gasta, alzase Ávila de los Caballeros.
Ávila, la de los Santos,
y las torres y los templos,
la guarnida de altos muros
y muy nobles caballeros(1)
Antiguos cronistas, no se sabe bien si llevados de su amor a la verdad o de su devoción a la
mística ciudad, afirman que Ávila fue fundada, antes que Roma, por Hércules, y según otros por su
hijo Alcideo, quien púsole el nombre de Obila o Abila, por ser éste el de su madre.
Lo cierto es que ya en tiempos muy antiguos, bajo la dominación romana, se tiene noticia
de su existencia. Perdida tras la rota del Guadalete,
fue varias veces ganada y otras tantas, vuelta a caer en manos de muslimes, hasta su definitiva reconquista por el Conde Don Sancho.
Por hallarse las Extremaduras en el siglo X,
más o menos a la altura de Ávila, arrastró la ciudad
precaria vida hasta su repoblación por el Conde
Don Ramón de Borgoña, yerno de Alfonso Vi de
Castilla el de la mano horadada.
Por entonces, y en el año 1090, se inició la
obra de la muralla, su más célebre construcción,
siendo los arquitectos Casandro el Romano y Florín
de Pituenga, francés de nación. En menos de diez
años, trabajando en ellas cientos de cautivos y no
pocos cristianos, acabáronse las obras. Mide el recinto murado 2.526 metros, siendo solo comparable en magnitud y poder al de Carcasona, en la
Septimania.
Junto a sus adarves fue destronado en efigie Don Enrique el Lunero, siniestro Rey de Castilla, por el arzobispo de Toledo don Alfonso Carrillo,
don Juan Pacheco y otros primates, hartos de sus
veleidades y mal gobierno.
Tras las murallas de la vieja ciudad, sus retorcidos callejones se nos muestran llenos de encanto. Por sus calles se nos imagina el paso de
monjes vestidos de pardo sayal, de altivos caballeros y bellas damas de vistoso atavío. Nos parece
vislumbrar al desdichado don Diego de Bracamonte
camino del cadalso, sobre una mula enlutada y él
con un capuz o caperuza de bayeta y las manos
atadas con un listón, y una cadena en un pie, delante de los sayones que a grandes voces publican:
Esta es la justicia que manda hacer el Rey nuestro
Señor, con este hombre que hizo público desacato
de su grandeza y poder(2).
En el recodo de una calleja, dos caballeros
pelean, desnudos los aceros; son de distinta cuadrilla, el uno de la de Blasco Ximeno, el otro de la de
Esteban Domingo. Era tal la belicosidad de los abulenses, que para mejor defenderse unos de otros,
se agruparon en dos bandos o cuadrillas: la de
Blasco Ximeno, Dávilas del blasón de seis roeles, y
la de Esteban Domingo, Dávilas de trece roeles. Se
llamará avilés en esta tierra, al que más hábil-es
para la guerra.
Difícil tarea es para mí bosquejar en un artículo las maravillas arquitectónicas, pequeñas y
grandes, que contiene la ciudad, ya que no hay una
piedra allí que no me importe.
Al fondo, dominando el caserío, se eleva la
catedral, enhiesta mezcla de templo y fortaleza. Comenzada en la décima centuria, y posteriormente
destruida, la reedificó Alfonso VI. Con restos de románico, en su mayoría es de estilo gótico primitivo.
Tras el altar mayor está el sepulcro alabastrino de
Alfonso de Madrigal, el que tanto escribió.
La trashumante corte de Fernando e Isabel,
en Ávila fincó varias veces, y en ella, en soberbio
sepulcro, mandan enterrar los restos del Infante
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Don Juan, el que murió de amor, el hijo malogrado
que trastocó los destinos de España con su muerte
prematura. Su mausoleo en el convento de Santo
Tomás, es una acabada muestra del arte escultórico italiano, pues de la lejana península mediterránea vino el artífice que lo labró.
Entre los templos avileses figura en lugar
preeminente la parroquia de San Pedro, del más
puro estilo románico. Su fábrica de sillares de piedra arenisca, por la acción de los siglos
tiene una pátina rojiza.
y Andrés Blázquez Dávila, hijo de Gonzalo Dávila,
gobernador del Maestrazgo de la Orden de Calatrava. Muerta doña María en 1512 sin sucesión, deja
por patrón de la fundación a su sobrino don Diego
de Bracamonte, casado con doña Isabel de Saavedra; a cuya muerte pasó al hijo de ambos, mosén
Rubí de Bracamonte, que dio nombre a la capilla.
El martillo y el triángulo o cabrio, blasón de
los Bracamontes, que campa
junto al de los Dávilas y Herreras en los muros exteriores y
en los machones del ábside, la
forma interna del templo, en
A extramuros encuenperfecto polígono, el adorno
trase la basílica de los Santos
que corona la silla presidencial
Vicente, Sabina y Cristeta, madel coro(3), que según Díaz y
ravilla del románico, cuya doraPérez es una de las alegorías
da piedra preludia la áurea aredel grado 30, que pertenece al
nisca tornasolada de la docta
de los caballeros Kadosch, y
ciudad del Tormes, alto soto de
otros detalles traídos por los
torres. En este templo dio gracabellos,
indujeron, y no inocias Jimena Blázquez por el
centemente, al malhadado Niéxito de la estratagema de los
colás
Díaz
y Pérez(4), modelo de erusombreros. Por ser en extremo curioditos sin escrúpulos, a aseverar que
sa, la relataré. Hallándose la ciudad
mosén Rubí fue fundado por masodesguarnecida de sus fieros guardanes con fines filantrópicos. Bien…,
dores, partidos de algarada para el
pues con perdón del venerable herAndalus, fue sitiada por la hueste momano Díaz y Pérez, hemos de decir
ra de Abdalá. Cundió el pavor por la
que
todos los autores, lo mismo maindefensa población, más Jimena
sones
que ortodoxos, coinciden en
Blázquez, hembra garrida, mandó
afirmar
que la primera organización
asomarse a las almenas a todas las
masónica en España la constituyeron
mujeres, cubiertas con sombreros de
los franceses que acompañaron a Fevarón, esgrimiendo cuantas armas tolipe
V, apenas terminada la guerra de
paron, y emitiendo tal fragor y algaraSucesión, y funcionó con carácter
bía, que los muslimes, temerosos, se
maestral
en Madrid bajo el título de
retiraron, creyendo estar la ciudad deLas
tres
Flores de Lis. En cuanto al
fendida de feroces guerreros.
Capilla y armerías de
grado de caballero Kadosch que le
mosén Rubí de Bracamonte
Muchas insensateces se han
adjudica a mosén Rubí, es imperdoproferido acerca de la capilla de monable en un masón, que debe saber
sén Rubí, aludiendo a sus pretendidos motivos deque tal grado fue creado por Federico II de Prusia
corativos masónicos. Nada más falso, como demás de doscientos años después de los hechos de
mostraremos La fábrica de mosén Rubí puede
que nos ocupamos(5).
considerarse dividida en dos partes: la capilla maEn cuanto al cabrio y el martillo, son piezas
yor y el crucero, presentan en sus ajimeces y maheráldicas
de común uso en Armería, y el blasón de
chones la sarta de perlas característica del gótico
los Bracamontes es muy conocido, tanto allende
decadente, mientras que el estilo de la fachada que
como
aquende el Pirineo. Deél dijo Gratia Dei, rey
mira al mediodía es greco-romano, y en ella se abre
de
armas,
a comienzos del siglo XVI:
la puerta principal, flanqueada por dos columnas
Con su cabrio y con su mazo
pareadas de estilo corintio. En el interior del templo
de argen en la primera sierra
se armonizan, igualmente, la arquitectura gótica
con la greco-romana, y su planta ofrece la forma de
Braquemonte con su brazo
cruz griega. En el centro se alza, reconstruido, el
desbarató un buen pedazo
sepulcro de los fundadores; doña María de Herrera
de gente de la Inglaterra
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lense de corazón: don Joaquín Otero Goyanes,
Marqués de Revilla (1905-1991). Sus espaciosos
aposentos, ricamente aderezados y moblados conforme al gusto sobrio y elegante de la España imperial de Carlos y Felipe, nos trasladan en mágico
evocador transporte a un mundo muerto, pero hermoso, en que lo trágico era lo
de todos los días. Nos pareció oir los pasos de Juan de
Contreras, Hidalgo aterrizado
de curtido rostro que no apergaminado, vuelto de poner su
pica en Flandes. El señor de
la casa, cubierto de cicatrices
de heridas que recibió en gloriosas gestas, en la sala del
estrado relataría a propios y
amigos sus hazañas allá en
la virgen América, en Italia su
ventura, en los brumosos países bajos.
Palacio de los Dávila
La ciudad conserva sus viejas piedras de
musgo y jaramago, ofreciendo un espectáculo melancólico y sombrío de una belleza íntima, como la
de un cuadro salido de los talleres flamencos del siglo XV. Palacios de granito se yerguen en sus estrechos callejones, adosados a la muralla los más;
otros, en el interior del recinto
amurallado, como el de Velada, frente a la catedral.
En portadas de caserones contemplamos viejas
piedras de escudo, cubiertas
por el glauco sello de los siglos. La Heráldica se nos
ofrece profusa en grifos, águilas, salvajes, torres, sierpes y
leones. Dávilas de seis y trece bezantes, Bullones, Bracamontes de masónico emblema,
Águilas,
Mújicas,
Henaos, Rengifos, Guillamas,
Marqueses de las Navas
La fachada principal
Zimbrones, Valderrábanos,
del palacio es idéntica a la
Velas, alzan sus torreones de
muralla. Magnífica puerta de arco formado por esrecia arquitectura por toda la ciudad. Numerosas
beltas dovelas sirve de ingreso, y está defendida en
son las casas de la nobleza, pues llegó a haber, a
lo más alto por fortísimo matacán o barbacana. En
fines del XVI, más de trescientos linajes nobles.
la parte superior de esta puerta, y entre dos velloDe las más bellas es la del Marqués de las
sos salvajes encadenados a dos heraldos a caballo
Navas, que se alza adosada al adarve tras el Alcátañendo sus trompas, se halla el escudo de los trezar, y los palacios del Obispo y de los Señores de
ce
roeles dados al hazañoso Hernán Pérez Dávila
Navamorcuende. Ha sido restaurado y alhajado con
en
la
batalla de Ronda, por haber tomado los moros
el máximo acierto por un ilustre prócer galaico, abu-
José Miguel
Pecos
Antiguo Maestro Mayor
de
Cejalvo
(+34) 670 826 300 - condecoralia@hotmail.com
Cuadernos de Ayala 76 -OCT/2018
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su estandarte con los trece bezantes, que significaban los trece pueblos de aquel subcalifato. La fachada es del 14 con posteriores reformas y añadidos. Sobre la puerta principal descrita lleva la fecha
1461. Las ventanas portan pequeños ají meses sin
columna. Llama la atención una enorme reja que
defiende la ventana contigua al
ángulo noroeste, decorada con
dos graciosas columnas y frontón
triangular. Entre las molduras de
la cornisa se le esta inscripción:
Petrus Avila et María Cordubensis anno MDXLI, y a lo largo del
zócalo este lema vanaglorioso y
en su época muy significativo,
Donde una puerta se cierra, otra
se abre, que tiene por origen el
mandato del emperador Carlos V
a dicho magnate para que cerrase la puerta que, sin su consentimiento, había abierto en la muralla.
El torreón majestuoso de los Marqueses de
Velada, frontero la catedral, tiene un hermoso mirador de hierro de crestería gótica con dos escudos a
los lados de sus jambas. Sus tres ventanas inferiores se defienden con bonitas y fuertes rejas.
El palacio del virrey del Perú Blasco Núñez
Vela, de plateresco estilo, posteriormente de los Duques de la Roca, ha sido acertadamente restaurado
y en él tiene su sede la Audiencia Provincial.
biblioteca, y en su archivo obras y cartas autógrafas
de Santa Teresa.
El torreón de los Guzmanes, macizo y aéreo
a la vez, se franquea por puerta
de arco dovelado de medio punto, encuadrada por gótica moldura, a cuyos lados campean las
armas de Mújicas y Bracamontes. Excepto la torre de sillería, el
resto del caserón es de mampuesto irregular de piedra rojiza.
En este palacio, hoy de los Condes de Crecente, se hospedó Alfonso XII en 1878. Parece ser
que fue la morada de don Iñigo
de la Hoz, abuelo de don Ramiro, el inolvidable personaje de la
novela de Larreta. Frente al torreón, el palacio de Superunda,
hoy del gran pintor Guido Caproti.
En la muralla, mirando al
valle Amblés(6), frente al castillo
de Aunqueospese, el balcón de
Adosado a la muralla, y
doña Guiomar. Allí la pobre enaPalacio de los Marqueses de Velada
en la calle de los Caños, hallase
morada clavaba sus garzos ojael palacio del linaje de en Henao,
zos en el castillo erecto por Nalvide foráneo origen, de los señores de Hainaut en
llos el moro, su loco amador. El castillo, cuentan las
Flandes. En nuestra época una figura señera, el
viejas consejas, fue levantado como un reto al paMarqués de San Juan de Piedras Albas, vivió en el
dre de Guiomar, que prohibía los amores de su reviejo palacio como uno de aquellos severos señotoño con el muslime de ojos de fuego. La fortaleza
res abulense es del tiempo de los Austrias. Canónidebe su nombre al grito de desafío de Nalvillos, langos le visitan, frailes barbados, aristócratas, doctos
zado al progenitor de su dama: aunque os pese, la
varones, forman el mentidero del Marqués. Llegó a
veré.
reunir Piedras Albas docenas de incunables en su
La casa de los del Águila-Estrada, hoy de la
Duquesa de Valencia, ostenta en su sencilla fachada renaciente las armas del adalid Sancho de Estrada el del águila, sobre las cuales en la iglesia de
San Bartolomé iba una humilde inscripción:
El gótico de Alemania
primo del Emperador
que trajo el águila España,
en campo de oro se baña,
siendo negro su color
Hacía esta alusión a su origen de los Duques de Güeldres, Estralen y Zutfen. Su verdadero
apellido era el de Estrada, pero por ser su blasón
un águila de sable, cambiaronlo en del Águila.
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018
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No era reciente en el XVI el florecimiento de
la nobleza y caballería en Ávila, pues ya en el XII se
formó una aguerrida hueste de 300 armados de a
caballo para defensa de la ciudad, y 200 para los
pueblos de la comarca, premiados con privilegios
por los Reyes Alfonso VI y VII, con objeto de que
mantuvieran a su costa armas, arnés y palafrén.
La nobleza abulense del XVI es la más recia
y auténtica representación de aquella España mística y guerrera que dominaba el mundo. Aquellos señores, caballeros, hidalgos y escuderos, no se paraban en barras al hablar de sus abuelos. El que
menos descendía de algún rey godo, si no de algún emperador romano. Los Bullones, más modestos, se contentaban con provenir del gran Godofredo, Rey de Jerusalén. Sin llegar a tanto, se
reducían los Zimbrón a proceder de los feroces cim-
brios, gente septentrional; los Valdivieso su, de un
Desiderio, sobrino del Rey Wamba.
De mi Desiderio godo,
y del Rey Wamba sobrino,
procede esta Casa en todo
por línea recta y camino
En América se distinguieron: Agustín de
Ahumada en Chile; en Charcas, Pedro del Peso; el
gran don Pedro de la Gasca, el pacificador del Perú; Blasco Núñez Vela, virrey; y el de más recio carácter, aquel Francisco de Carvajal, el demonio de
los Andes, que trasplantó allende el océano, con la
audacia del guerrillero, nuestro
espíritu individualista y atomista. General del felicísimo Ejército de la Libertad, se llamaba
a sí mismo, en frase que parece copiada de una proclama de
Bolívar. Se ufanaba de haber
despenado en una sola batalla
más de cincuenta cristianos, a
los indios no los cuento, decía
el chancero Carvajal, que camino del cadalso hizo chistes
con el verdugo.
Lo cierto es que la ciudad se repobló con gentes venidas del alfoz de Lara, de Asturias, de la Montaña, León y
Burgos, contándose entre
ellas algunas familias de viso.
Bien les vendría a estos nobles un poco presuntuosos el
fingido epitafio que Arias Montano hizo de Adán, sátira en
verdad intencionada y aguda:
En este lugar está sepultado
Palacio de los Condes de Polentinos
En Ávila nació Teresa
Adán, primer hombre del munde Cepeda, a la que cuadran
do y cabeza de todo el género
bien los versos de San Juan de la Cruz, nacido en
humano, príncipe de todo el orbe. No tuvo otro patierra de Ávila:
dre que a Dios, su madre fue la Tierra. Hijodalgo y
Señor de gran solar plantado en las partes del
Mil gracias derramando
Edén, y por suelo todas las tierras y mares.
pasó por estos sotos con presura
Bien se les podía perdonar a los caballeros
y yéndolos mirando,
avileses sus puntillos de honra, pues serán los pricon sólo su figura,
meros en servir fielmente al rey, y el eco de sus hazañas llegó a los más remotos confines. No olvidavestidos los dejo de su hermosura
ron a sus hermanos en Cristo menesterosos, y son
A guisa de broche con que cerrar la ya larga
numerosas las fundaciones de obras Pías, algunas
evocación de Ávila, fina, sobria, mística y elegante,
de ellas destinadas a ayudar a los hidalgos pobres,
hagamos un elogio de la mujer avilesa con los coque los había y mucho.
nocidos versos de Marquina:
Entre los varones ilustres en armas y letras
nacidos en Ávila y su tierra, citaremos a don Pedro
Dávila, que tomó Olmedo por los Reyes Católicos;
Alonso Díaz de Montalvo, autor del famoso Ordenamiento de su nombre, famoso legista; Diego de Vera y Diego Rengifo, con el Gran Capitán; Sancho
Zimbrón, compañero del Duque de Alba en la conquista de Navarra y luego indómito comunero; el
Marqués de las Navas; el Gran Duque de Alba;
Sancho Dávila, el rayo de la guerra; don Juan del
Águila, tan dado a la guerra que ya a los dieciocho
años se alistó en Flandes, en la compañía de don
Gonzalo de Bracamonte, y luego fue descanso de
Farnesio y terror de holandeses. Pasó a Irlanda
contra los ingleses, y de su estancia allí que
da algo más que el eco de sus hazañas: cientos de
atezados bigardos de ojos vivos en la comarca de
Connaught. El Prior de San Juan le presentó a Felipe II con la frase conozca Vuestra Majestad un vasallo que nació sin miedo.
De la tez es trigueña;
su frente, luna clara en los sembrados;
trae, como lugareña,
de sus labios colgados
los refranes del pueblo y sus dictados
N OTAS
Este artículo se redactó en 1957
1) Eugenio Escribano, Castilla, Madrid, 1922.
2) Bracamonte fue acusado de poner unos pasquines
censuradores de la política y actuación del Monarca Prudente.
3) Una esfera o globo terrestre, atravesado por un puñal
blandido por una mano.
4) Nicolás Díaz y Pérez, La francmasonería española,
Madrid, 1894
5) Mariano Tirado de Rojas, La Masonería en España,
Madrid, 1892-1893, dos tomos.
6) Corrupción de Avilés.
Cuadernos de Ayala 76 -OCT/2018
[9 ]
DE RE POPULAR
CUARENTA Y MÁS REFRANES
DE NOBLES E HIDALGOS
por el Dr. Luis de Cevallos-Escalera y Gila, de la Académie Belgo-Espagnole d’Histoire
En el número 62 de los Cuadernos de Ayala
(de abril a junio de 2015), nos regaló José Manuel
Huidobro con medio centenar de bellos refranes españoles, atinentes a los hidalgos. Y hoy traigo a colación otra cuarentena de dichos,
entre los que hay algunos muy
semejantes a otros de los recogidos por Huidobro, en su labor
de espigado de la obra Escuderos e hidalgos en los refranes
españoles, de Juan José Álvarez Díaz. Aquí van:
Galgo, hidalgo, negro y judío,
siempre están muertos de frío.
Hidalgo honrado, antes roto que
remendado.
Más vale migaja de rey, que zatico de caballero.
Hidalgo pobre, taza de plata, mesa de roble y olla de
pobre.
El villano rico, con hija de noble pobre casa a su hijo.
Con un pan, diez hidalgos hartarás.
A hidalgo rico, bien le estará un
capillo roto.
Para tomar el don, es menester discreción.
Armas, letras y dineros, hacen
hijos caballeros.
Noble rancioso, hombre orgulloso.
Quien gana nobleza, hace nuevo linaje.
Blasón sin mesnada, nada.
Grandeza sin dinero, es como
badil sin fuego.
Rocín de hidalgo, seco como
galgo.
En lugar de señorío, no hagas
tu nido.
Señores, cerdos y caballos, por
la raza has de buscallos.
Como una caña, derecho, el linaje ha de ser hecho.
El padre mercader, el hijo caballero y el nieto pordiosero.
La comida del hidalgo, poca
vianda y mantel largo.
Los linajes más soberbios, del polvo nacieron.
Ni hidalga con villano, ni villana con hidalgo.
Cuando nace el hidalgo, le pesa al villano; y mientras vive, le persigue; y cuando muere, no le duele.
En linajes luengos, alcaldes y pregoneros.
Con diez nobles abuelos no se llena el puchero.
Rocín, hidalgo, galgo y gorriones, cuentan malas generaciones.
No hay linaje sin pariente que le ultraje.
Conde que tiene doblones, casa con quien le acomode.
Hidalgo de gotera, el hambre por de entro y los codos por de fuera.
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [10]
De ricos van a nobles, y a veces a pobres.
Hidalgo de aldea, ni paga ni
niega.
El noble rogado, el villano comprado.
En la mesa del hidalgo, mucho mantel y pocos platos.
Mátenme hidalgos y no me den vida villanos.
Noble improvisado, plebeyo endiosado.
Por armas y por letras, se alcanza la nobleza.
Hidalgo que tiene galgo, ya tiene algo.
Cuanta más nobleza, más llaneza.
Los linajes, en unos empiezan y en otros acaban.
Hidalgo como el rey, dinero no tanto.
Bueno es ser conde, aunque no se sepa de dónde.
Propio de hidalgos gozar lo que Dios, desde su altura, tuvo a bien nos comendar.
DE RE HISPANICA
EL ENIGMA DEL SEPULCRO DE UN SUPUESTO
EMBAJADOR ESPAÑOL EN LA ISLA DE SHEPPEY,
SOBRE EL TÁMESIS
por el Dr. D. Alfonso de Ceballos-Escalera y Gila, Vizconde de Ayala
Hace ya muchos años, más de treinta, que
llegó a mis manos un interesante grabado calcográfico dieciochesco, insólitamente hecho a la aguatinta, que representa,
según su epígrafe,
The monument of a
Spanish Ambassador, in Minster
Church, in the Island of Shepey.
la rara lámina, tengo el deseo de identificar al personaje. Y ya es hora de pasar adelante, consultando en primer lugar las fuentes británicas, para después examinar las
posibles fuentes
hispanas.
Comencemos
por la lámina en sí.
He podido saber
que el dibujo se hiEs de reguzo a finales de malar tamaño, aproxiyo de 1732. El cémadamente lo que
lebre artista britáhoy sería un folio, y
nico William Hoestá firmado del digarth(1) y cuatro de
sus amigos y conbujante Scott, y del
tertulios de la tagrabador Richard
berna londinense
Livesay.
Según
Bedford Arms -los
consta al pie, fue
pintores Samuel
estampado por el
Scott y su cuñado
mismo Richard LiJohn Thornhill, el
vesay junto a la seGrabado que dice representar la tumba de un Spanish Ambassador
marino
William Totñora (viuda) de HoAbajo, los pintores británicos Willam Hogarth y Samuel Scott
hall, y el escritor
garth en Leicester
Ebenezer Forrest-,
Fields, el 27 de nohicieron entonces un
viembre de 1781.
breve viaje a la isla de
Nada
más
Sheppey -de la que
contiene que la figura
luego
diré- entre el 27
yacente de un cabay
el
31
de mayo de dillero revestido de archo
año.
Fruto de ese
madura, mutilado su
viaje fue el relato titubrazo diestro, con la
lado The five day’s
cabeza cubierta de
peregrination
around
una melena bien corthe isle of Sheppey,
tada, apoyada sobre
escrito
por Forrest. El
una almohada, y los
29
de
mayo
visitaron
pies puestos sobre un
la iglesia de Munster,
perro que más bien
en
la que hallaron tres
parece un caballejo o una oveja en el dibujo. El momonumentos
sepulcrales:
el
de
lord Cheyne, el de
numento sepulcral tiene su basamento, y está dennuestro
Spanish
Ambassador,
y
el
de lord Shorland.
tro de un arcosolio con la forma de un amplio arco
El narrador recuerda que su amigo Samuel Scott,
escarzano. Todo el trazo es de una gran sencillez, y
made a drawing of the Ambassador, and Hogarth of
el estilo apunta ya al pre-Romanticismo.
lord Shorland. He aquí la noticia precisa del dibujo
Como es natural a mi condición de curioso,
original del grabado que nos ocupa, y de su autor(2).
desde hace ya los mismos años de la posesión de
Cuadernos de Ayala 76 -OCT/2018 [11]
Años después, el grabador londinense Richard Livesay(3), que encontró el manuscrito y los
dibujos cuando se hospedaba en la casa de la viuda de Hogarth, adquirió y grabó los diseños de los expedicionarios, y, con el texto
original del viaje de 1732 debido a Forrest, los publicó en
Londres en 9 folios, respetando su color original, es decir el
sepia, mediante la técnica del
grabado a la aguatinta. Y aquí
tenemos ya la noticia precisa
del grabador de la lámina.
sia abacial de Minster fue vendida a sir Thomas
Cheyne (o Cheney), y en manos de sus sucesivos
propietarios sufrió varias reformas, hasta llegar a
nuestros días. Por cierto, bastante intacta.
Church of the Blessed Virgin Mary and Saint Sexburgha), que ocupa la posición más elevada de todo el término isleño. Fundada como monasterio benedictino femenino por la Reina Sexburga en el
664, estuvo bajo el patronato de los reyes de Kent.
Dañada por los vikingos daneses en el siglo IX, y
de nuevo en el siglo XI, tras la invasión normanda
del 1066, Guillermo el Conquistador ordenó su reparación; y fue reconstruida por el arzobispo de
Corbeuil entre 1123 y 1139. Tras la desamortización
de los monasterios y conventos británicos ordenada
por el cismático Enrique VIII en 1536-1539, la igle-
La confusión viene dada porque en las historias locales, y precisamente las de esta iglesia,
recogidas por el dicho reverendo John Cave-Browne(5) a finales del siglo XIX, también sugieren que
se trataba del sepulcro de un militar español de alta
graduación. Quien habría sido capturado en 1588
por sir Francis Drake (1543-1596) o por sir Edward
Hoby (1560-1617), a bordo de uno de los galeones
de la Gran Armada, y quedó en rehenes; primeramente, a bordo de un navío inglés en Nore, y después en el vecino castillo de Queenborough: el rescate no fue nunca pagado por sus deudos y
A partir de aquí, las noticias
son algo confusas. Por una
parte, buscamos el sepulcro
de un personaje fallecido en el
siglo XV o en los primeros
años del siglo XVI. Ese sepulcro, reproducido en el grabado
de 1781, se conserva efectivamente en la iglesia de Minster,
aunque en mal estado. Se traSituemos ahora el esta de un arcosolio de regular
pacio en que los expedicionatamaño, adosado al muro y
rios halaron el motivo del gracon bóveda fingida, cuyo babado. La isla de Sheppey (isla
samento y fondo del nicho esde ovejas) está situada en la
tá decorado con motivos góticosta norte de Kent, en las incos, pero lamentablemente sin
mediaciones de la desembocaemblemas heráldicos, aunque
dura del Támesis, o sea a unos
los tuvo: en el fondo se ven los
68 kilómetros del centro de
contornos de tres de ellos, que
Londres; su extensión es de
el tiempo ha borrado. También
unos 93 kilómetros cuadrados,
se perciben otros tres escudos
y su población no alcanza los
Iglesia de Minster Abbey, en Sheppey
en el arca figurada que le sirve
3.000 habitantes. En su térmide basamento. La efigie origino existen trece pequeñas alnal del caballero muestra su larga cabellera, cortadeas -Sherness, Minster, Chequers, Warden, Leysda a la moda del último decenio del siglo XV, y perdown, Shellness, Harty, Elmley, Rushenden,
mite valorar que la armadura que le cubre era muy
Queenborough, Halfway, Brambledown y Eastlujosa, lo que evidencia su alta posición. Sobre el
church-, varias fortificaciones, baluartes y baterías,
pecho, un collar rico adornado de estrellas y de roe incluso tres prisiones. Su historia es larga en el
sas, del que pende la insignia completamente botiempo, habiendo estado ocupada desde el Neolítirrada de una Orden caballeresca. También parece
co, pasando por los normandos, los sajones y los
de buena factura el fondo del arcosolio y el frente
demás sucesivos pobladores de esta región de la
del basamento, de fina tracería; falta el ángel que
isla de la Gran Bretaña(4).
guardaba su sueño, a la cabecera, porque ha sido
El pueblo de Minster, al norte de la isla, ya
mutilado. Todo ello, y que el material utilizado fuese
frente a la embocadura del Támesis, es el que nos
el
mármol de Bethersden -según afirma el revereninteresa, pues allí está la iglesia en la que se hallado John Cave-Browne-, abunda en la idea de que la
ba en 1781 el sepulcro de nuestro interés. Se trata
tumba fue costosa, y que perteneció a un personaje
de la llamada Minster Abbey o iglesia abacial de la
de alta alcurnia.
Beata Virgen María y Santa Sexburga (The Abbey
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [12]
parientes, y el español murió en cautividad.
En los registros parroquiales aparece como
fallecido el 5 de diciembre de 1591 (Signior Jeronimo, a Spanish prisoner to Sir Edward Hoby, taken
in the fight with the Spanish flete). El repetido reverendo Cave-Browne, inspirado en unos papeles del
Conde de Salisbury, conservados en el Record Office Museum(6), sugiere que este caballero sería el
segundo del general Moncada, que fue capturado el 30
de julio de 1588 en el ataque
inglés al puerto de Calais, y
que this mann yt is here a
proper Jentleman of Salamanca. Los cronistas del templo añaden que la efigie sobre la tumba he clasps a
small egg shaped image in
his hands which is said to represent his soul (sostiene en
sus manos la imagen de un
huevo, que representa su alma)(7).
a Inglaterra. Creo que ese personaje fuese más
bien un noble de la región, toda vez que no parece
habitual en aquella época que se erigiese un túmulo
a un difunto extranjero: una cosa es que un miembro de una embajada hispana falleciese allá, yendo
de camino, y se sepultase en Minster, y otra muy
improbable que posteriormente sus lejanos familiares y deudos sufragasen una lujosa y costosa sepultura como la que hemos contemplado. Tampoco
sería sufragado por la Corona inglesa, porque no era de
costumbre entonces esa clase de agasajos. A más, la
costumbre de la época era
trasladar el cuerpo hasta su
patria, embalsamado, o al
menos su corazón.
Pero, si bien mis pesquisas para identificar al supuesto Spanish Ambassador
han resultado infructuosas, al
menos han servido para rescatar del olvido a uno de los
capitanes de la Gran Armada,
el signior Jeronimo, quizá un
ilustre soldado salmantino, de
cuya vida y nombre que habrá
que saber más. Laus Deo.
Pero, por la fecha de la
muerte de ese don Jerónimo,
es muy improbable que se trate del mismo personaje enterrado en el sepulcro que existe
en Minster, que dibujó Scott en
N OTAS
1732 y que grabó Livesay en
1) William Hogart (Londres, 16971781. Porque ese sepulcro es
1764) fue un célebre pintor, ilusmucho más antiguo, de casi un
trador y grabador, que se hizo famoso por sus escenas satíricas
siglo antes. Además, en 1833
sociales y políticas y por ser el
se trasladó el monumento fuEstado actual de la tumba
precursor
de las historietas o cónerario que al parecer pertenemics.
ció a ese militar español, al te2) Samuel Scott (Londres c.1702-1772) fue un afamado
rreno exterior adyacente a la iglesia de Minster.
Hasta aquí, ningún indicio nos permite identificar al supuesto Spanish Ambassador allí sepultado. Tampoco aparece en ninguna de las crónicas
hispanas contemporáneas, que he revisado acuciosamente, la noticia de la muerte de un embajador
castellano o aragonés, en el camino de ida o de
vuelta a su misión -que no otra circunstancia explicaría su sepultura en un lugar tan de paso como la
isla de Sheppey-.
Mi conclusión, supeditada siempre a que
aparezcan nuevos documentos o noticias, es que la
leyenda local, recogida por Forrest en 1732 y por
Cave-Browne en 1897, es decir que el personaje
del sepulcro fuese a Spanish Ambassador, no parece ni siquiera remotamente documentada ni justificada. Tampoco creo que se tratase de un miembro
distinguido del séquito de algún embajador enviado
pintor de temas marítimos, destacado seguidor del Canaletto.
3) Richard Livesay (1750-1826) fue un pintor y grabador
conocido en el Londres de su época.
4) Noticias tomadas de la Web, en varios sitios.
5) Rev. John CAVE-BROWNE, “Minster in Sheppey”, en
Archaeologia Cantiana, 22 (1897), págs. 144-168; la referencia en las págs. 163-165.
6)Record Office Museum, State Papers, Dom. Elizabeth,
vol. CCIII, nº 66.
7) Edward W. BRAYLEY, Beauties of Kent (1808), le llama Cerinemo. T. MOT, en el Gentleman’s Magazine de
1798, dice que se llamaba Germona, y que era commander of the Land Forces on board the Spanish Armada. El rev. John CAVE-BROWNE, op. cit., ha sido el único que, a través de los registros parroquiales, pudo
identificar bien su nombre, al menos el de pila, y quizá su
salmantina patria.
Cuadernos de Ayala 76 -OCT/2018 [13]
DE RE FAMILIAR
ALESSANDRO LA MARMORA
(1799-1855)
APPUNTI FAMILIARI, GENEALOGICI E ARALDICI
Prof. Dott. Fabio Cassani-Pironti, Conte di Giraldeli
Alessandro Evasio Maria, di cognome faceva Ferrero, benché la storia ce lo abbia tramandato
come Alessandro La Marmora, dal nome del feudo
avuto in marchesato dai suoi avi. Non è l’unico personaggio conosciuto attraverso il predicato: pensiamo al caso di Camillo,
che di cognome faceva
Benso, da tutti noto come Camillo Cavour, oppure Massimo, che faceva Taparelli, conosciuto come Massimo d’Azeglio, o Carlo Felice, il
cui cognome era Nicolis,
noto come Carlo Felice
di Robilant e così tanti altri.
1576, deceduto a Biella il 18 giugno 1650. Suo figlio
primogenito, Tommaso Felice, 2° Conte della Marmora e di Canisio, nato dalle seconde nozze con
Ottavia Solaro(1), fu elevato al titolo di Marchese nel
1671 e da questi giungiamo in linea retta al
nostro eroe, la cui esatta
titolatura è: Alessandro
Ferrero dei Marchesi della Marmora, dei Consignori di Borriana, Beatino, Pralormo e Sandigliano.
Chi erano i Ferrero? La leggenda vuole la
famiglia biellese discendente da un ramo degli
Acciaioli di Firenze. Il primo membro del quale si
hanno notizie certe è
Besso, vissuto nel XV
secolo. I figli Sebastiano
(1438-1519) e Gian Enrico (1468-1525) furono
infeudati dei beni di Borriana e Beatino ai quali
si aggiunse il feudo di
Gaglianico proveniente
da Bartolomeo Scaglia,
no- nno materno.
Marmora è una
località nell’alta Valle
Maira in provincia di Cuneo che Sebastiano Ferrero ottenne in contea,
insieme a Canosio, nel
1610, grazie al fratello
Gian Stefano (II), VescoIl generale Alessandro Ferrero de La Marmora
vo di Vercelli (29 maggio
(1799-1855)
1599), Abate Commenfondatore del Corpo dei Bersaglieri
datario di Santa Maria di
Contignano (1580), Proposto di Santa Fede di Vercelli (1590), Cappellano
Da loro originarono i due rami principali della
di Sant’Antonio nella Chiesa di San Silvestro di Crefamiglia: Da Sebastiano, al quale è legata, agli inizi
valcore presso Bologna, Referendario Apostolico
del ‘500, la costruzione del complesso conventuale
dell’Una e dell’Altra Segnatura, Cameriere di Sua
di San Sebastiano, discesero i Ferrero che con l’aSantità, Nunzio Apostolico in Germania (1604), in
dozione di Filiberto da parte di Ludovico Fieschi
Ungheria ed in Polonia, nato a Biella il 3 giugno
(1517) si sarebbero chiamati Ferrero Fieschi. Ques
1568, deceduto a Torino il 21 settembre 1610, perto ramo della famiglia, molto articolato, vantò, oltre
sonaggio assai influ- ente. Sebastiano Ferrero era,
al capostipite, diversi illustri personaggi, in particolainoltre, Consignore di Borriana, Beatino e Sandigliare ecclesiastici. Il legame con la Chiesa si concretò
no, Cavaliere di Gran Croce dell’Ordine dei Santi
con l’acquisizione del feudo pontificio di Masserano
Maurizio e Lazzaro e suo Gran Tesoriere (20 agosto
e Crevacuore con titolo di principato.
1620), Commendatore di Santa Fede di Vercelli delDa questo ramo si generò la linea dei marl’Ordine Mauriziano (dal 1620 al 1633), Paggio della
chesi di Romagnano, con capostipite Goffredo, figlio
Duchessa di Savoia (1589), Gentiluomo di Camera
di Sebastiano, infeudato nel 1562, e che si estinse
del Duca di Savoia (1632), nato a Biella il 18 giugno
nel 1585.
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [14]
Da Gian Enrico dis
cese invece la linea cadetta
dei Ferrero conti (1610), poi
marchesi (1671) della Marmora. Essi possedettero in
Piemonte vaste proprietà
terriere pervenute per infeudazione o acquisto o, ancora, frutto di abili alleanze
matrimoniali, i cui nuclei
principali si attestarono nel
Biellese, tenimenti di Borriana, Ponderano, Occhieppo,
Cavaglià, e a Pralormo nell’
Astigiano(2).
Sentiamo cosa scrive il Barone Antonio Manno,
Commissario del Re presso
la Consulta Araldica, nel parere del 24 gennaio 1900
conservato nel loro fascicolo all’Archivio Centrale dello
Stato: “Fra le maggiori famiglie del Piemonte, è quella
biellese dei Ferrero, Marchesi della Marmora e Principi di Masserano, che da
molti secoli hanno dato alla
Patria personaggi insigni e
alla Dinastia servitori devoti
e benemeriti. La collana suprema fregiò spesso i Ferrero, così i più alti uffizzi di
Corte, di Stato nonché la
porpora e le mitre.
Nella penultima generazione, il primogenito
Carlo fu Cavaliere dell’Annunziata e Primo aiutante
di Campo del Re Vittorio
Emanuele II di gloriosa memoria; il secondogenito Generale Alberto rimarrà più
specialmente lodato per le
illustrazioni scientifiche e archeologiche nell’Isola di
Sardegna; il terzo Generale
Cavaliere Alfonso, Cavaliere dell’Annunziata, e Generale d’Esercito colla spedizione di Crimea…” e così di
seguito.
te del nostro Alessandro, figlio del fratello Carlo, di rinnovazione del titolo marchionale a favore della figlia
Enrichetta. Inizia con una
supplica autografa datata 6
gennaio 1900. Sentendosi
prossimo alla fine - morirà il
21 novembre di quello stesso anno - e non avendo altra discendenza che quella
della figlia, il nipote Guglielmo era nato da poco, ricorre al Sovrano con una toccante lettera: … ultimo discendente maschio di antica
famiglia da secoli devota
della Real Casa di Savoia,
che ebbe la fortuna di rendere importanti servizi in
tempi remoti e moderni alla
Monarchia, desiderando
che il nome della Marmora
non si estingua, supplica la
Maestà Vostra acciò si degni, con suo motu proprio,
rinnovarlo coll’annesso titolo marchionale a favore della figlia....
Egli otterrà la successione, con Decreto dell’8
febbraio 1900, firmato da
Re Umberto, pochi mesi prima del 29 luglio, quando fu
assassinato da Gaetano
Bresci a Monza. Successivamente, un Decreto Ministeriale del 16 maggio 1904
confermerà la successione,
dopo la morte di Tommaso,
a Enrichetta e alla sua dis
cendenza.
Enrichetta, 8ª Marchesa della Marmora, nata
a Biella il 1° agosto 1874,
deceduta a Biella il 5 agosto
1948, aveva sposato a ToriDocumenti della Consulta Araldica
no l’11 aprile 1899, il Conte
riguardanti la famiglia Ferrero
Mario Mori Ubaldini degli Al1900
berti,
Patrizio di Firenze e di
(Archivio Centrale di Stato, Roma)
Siena, la cui famiglia ebbe il
riconoscimento dei titoli di
Conte per tutti i maschi e di Patrizio di Siena e FiQuesto incartamento presso la Consulta rirenze per maschi e femmine, con decreto Ministeguarda la richiesta fatta da Tommaso Ferrero, nipoCuadernos de Ayala 76 -OCT/2018 [15]
riale del 22 settembre 1889, ce
lebre storico nato a Firenze il 26
novembre 1869,
deceduto a Gerbido Torinese il
22 agosto 1918,
da cui avrà i figli,
Guglielmo, Giulio e Raffaella, e che attraverso il primogenito si giunge
agli attuali rappresentanti.
Enrichetta era donna
devota. Nelle mie ricerche
nell’Archivio Segreto Vaticano ho trovato una richiesta
di Oratorio Privato, luogo
sacro destinato al culto divino eretto nelle case private
a favore soltanto d’una famiglia, per il palazzo di Biella,
concesso a lei, marito e ai figli Guglielmo e Giulio; Raffaella non era ancora nata.
molto interessante.
Veduta del palazzo dei Ferrero della Marmora
a Biella (Italia)
In basso, le armi della famiglia
e la celebre sentenza del 1843
sul Principato di Masserano
Qualche nota araldica. Lo stemma dei Ferrero
è: d’argento, inquartato da
un filetto di nero, al I e IV al
leone d’azzurro, linguato, armato e membrato di rosso,
al II e III, all’aquila bicipite di
nero, coronata d’oro sulle
due teste, di nero, armata di
rosso (Ferrero), nel cuore,
bandato d’azzurro e d’argento, di sei pezze (Fieschi).
Tra le carte del già
citato incartamento presso
la Consulta Araldica, ho trovato il retro di una busta inviata da Tommaso, nella
quale si posso vedere vari
sigilli apposti su ceralacca
rossa. Interessante notare il
bandato dei Fieschi accollato alle croci mauriziana e
melitense. Non ha alcun valore questo reperto; mi piace immaginare il Barone
Manno intento a ritagliare
ciò che per uno studioso
della materia era invece
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [16]
Lo stemma dei Mori
Ubaldini degli
Alberti è: Partito, nel primo
scaccato d’argento e di nero
(Mori Ubaldini); nel secondo
d’ azzurro, a quattro catene
moventi dagli angoli dello
scudo e legate in cuore da un
anello, il tutto d’argento (Alberti).
A Biella vi è lo
splendido Palazzo La Marmora, un edificio con corte
porticata e un ampio giardino-terrazza sulla città, frutto
di un graduale accorpamento avvenuto nei secoli e
ben leggibile nelle strutture;
ancor oggi conserva parte
dei tesori e degli antichi arredi di famiglia. Un altro palazzo, vera residenza della
famiglia a partire dal XVIII
secolo, è in Torino, in via
San Filippo.
Il testamento del
Principe di Masserano Carlo Ludovico, senza prole,
lasciava alla sorella primogenita Carlotta Margherita
sposata Rafelis di SaintSauveur la dimora torinese
detta Bonne Femme e l’usufrutto del castello di Gaglianico con tutti i beni,
mentre al cugino Carlo
Emanuele Ferrero della
Marmora toccavano il castello di Masserano con mobili, quadri, pertinenze e tutti
gli onori e le prerogative insieme al palazzo del Piazzo. Alla morte di Carlo Ludovico (1833) tra la Marchesa Rafelis e il Marchese
La Marmora si accese una
disputa concernente il titolo
principesco e il patronato
della Collegiata di Massera-
no, che vennero infine riconosciuti ai La Marmora (1843).
Torniamo ora al
nostro protagonista. Ale
ssandro era nato a Torino il 27 marzo 1799, undicesimo (non ottavo come si legge ovunque) dei
16 figli di Celestino, 5°
Marchese della Marmora, Consignore di Borriana, Beatino, Pralormo e
Sandigliano, Primo Scudiero della Principessa di
Piemonte (1787), Capitano del Reggimento di
Fanteria “Ivrea”, degli
Eserciti del Re di Sardegna (1787), nato a Torino
il 7 luglio 1754, deceduto
a Torino il 30 agosto
1805 e di sua moglie
Raffaella Argentero dei
Marchesi di Bersezio, figlia del Marchese Niccolò Amedeo e di Luisa
Morozzo dei Marchesi
della Rocca, nata a Torino il 2 febbraio 1770, deceduta a Biella il 21 novembre 1828.
Seguendo la tradizione di famiglia, anch’egli sarebbe stato avviato alla carriera militare ma nel 1809, poiché
era ancora troppo giovane per entrare nell’esercito come i fratelli Alberto
e Carlo, fu nominato paggio presso il Principe
Camillo Borghese, Governatore del Piemonte,
grazie all’intervento della
madre, un incarico ques
to che, secondo l’imperatore Napoleone, spettava
soltanto ai figli delle famiglie nobili subalpine
più influenti.
tano ad essere uno dei
più brillanti esempi di ufficiale.
Diligente negli stu
di e particolarmente portato per le discipline
scientifiche, incominciò a
vagheggiare l’idea della
creazione di un corpo di
fanteria scelta e armata
alla leggera, in modo che
fosse in grado di avventurarsi nei luoghi più impervi e potesse essere
utilizzata nelle imprese
più rischiose e difficili.
Nel gennaio 1831, in un
fascicolo di 28 pagine
esponeva la sua proposta per l’istituzione di un
corpo dei Bersaglieri e
all’inizio di quello stesso
anno inviava al primo segretario di Stato per gli
affari di Guerra e Marina,
Matteo Agnès des Geneys, la proposta per la
formazione di una Compagnia di Bersaglieri ed il
modello di un Arma, che
a questi riuscirebbe di
maggior vantaggio”, persuaso che le varie compagnie di quel corpo
avrebbero potuto “rendere dei servizi importanti,
principalmente
nelle
(3)
montagne .
Nonostante numerose difficoltà, riuscì
alla fine a far approvare il
proprio progetto; infatti
con Regio Brevetto del
18 giugno 1836, Re Carlo Alberto istituiva il Corpo dei Bersaglieri ed il 21
dello stesso mese AleSopra, il decreto di Re Umberto II
ssandro Ferrero veniva
concedendo la sucesione feminile del titolo di
promosso Maggiore CoMarchese di La Marmora nel 1900
mandante
del suddetto
In basso, documento sui Mori Ubaldini Alberti
Corpo. La ferma com(Archivio Centrale di Stato, Roma)
plessiva
per i nuovi solCon la caduta di
dati
era
di
quattordici
anni
mentre
era
di sedici per
Napoleone egli entrò a far parte del ricostituito eserla
fanteria
ordinaria
-,
di
cui
due
da
passare
sotto le
cito piemontese e le sue capacità e intuizioni lo porCuadernos de Ayala 76 -OCT/2018 [17]
armi, sei nella riserva e sei in congedo illimitato. Egli
in persona iniziò ad occuparsi dell’addestramento
dei nuovi soldati per renderli agili e veloci, capaci di rapidi movimenti. Nel giugno del
1839 il Corpo dei Bersaglieri venne ingrandito con l’aggiunta di una terza
compagnia e nel febbraio del ‘43 con
una quarta. Nel frattempo, il 20 gennaio 1840, Alessandro era stato promosso Luogotenente Colonnello; il 9
aprile 1844 divenne Colonnello Comandante i Bersaglieri, e con questo
grado egli partecipò nel 1848 alla prima
guerra d’Indipendenza.
Il 1º luglio 1854, a 55 anni, un anno prima
della partenza per la Crimea, Alessandro sposa Rosa dei Marchesi Roccatagliata Ceccardi, vedova del Marchese Luigi Rati Opizzoni,
nata a Genova il 12 settembre 1816,
deceduta il 5 settembre 1865, conosciuta a Genova mentre era a riposo
dopo una caduta da cavallo. La coppia non avrà figli.
Sarà decorato della Medaglia
d’Argento al Valor Militare; Medaglia
piemontese della guerra di Crimea.
Sarà Cavaliere di Gran Croce decorato
con Gran Cordone
dell’Ordine dei Santi
Maurizio e Lazzaro e
Commendatore del
Sovrano Militare Ordine di Malta, il cui Decreto di nomina è conservato presso la Bi
blioteca Magistrale
dell’Ordine, finora inedito.
Proseguì la
sua carriera sempre in
ascesa fino a quando,
il 22 marzo 1855, fu
nominato Comandante della 2ª Divisione
del Corpo di Spedizione in Oriente ed il 19
maggio s’imbarcò per
la Crimea. Pochi giorni dopo essere giunto
La salma sarà
a destinazione si arimpatriata in Italia nel
mmalò di colera; co1911 con una granminciò a star male il 4
diosa manifestazione
giugno e muore nella
e sepolta a Biella nenotte tra il 6 e il 7, su
lla cripta La Marmora
un letto da campo a
nella Basilica di San
Kadikoi, in Turchia,
Medalglia in onore al generale La Marmora
Sebastiano(4).
come uno qualsiasi
Al mezzo, la carica dei Bersaglieri a Porta Pía (Roma)
dei suoi soldati. La
il 20 settembre 1870 (olio di Michele Cammarano)
NOTE
In basso, l’ideario di questi soldati
salma fu sepolta poco
distante dall’accampa1) Sposò in prime nozze a Biella il 3 febbraio 1593
mento ma sarà poi traslata due
Caterina Masserano, figlia del
volte e ricomposta nel cimitero
Nobile Filiberto Masserano dei
della Marina di Balaklava dove
Signori di Castellengo, e di
furono sepolti altri comandanti
Amedea
Gromo dei Signori di
della guerra in Crimea.
Ternengo, nata a Biella nel
La morte per colera ha
1577, deceduta ivi il 25 novemun antefatto singolare: egli
bre 1615. In seconde nozze, nel
aveva scritto una memoria sui
1620, Ottavia Solaro, figlia di
modi di cura e prevenzione di
Faraone II (detto Carlo Emanuequesta malattia mentre era cole) Solaro, Conte della Moretta, e di Paola Provana dei
mandante della Divisione Militare di Genova e in
Conti di Beinette (*1603 †1681).
città infuriava un’epidemia.
2) S. Cavicchioli, Famiglia, memoria, mito. I Ferrero
Alessandro dedicò tutta la sua vita alla causa
della Marmora (1748-1918), 2004.
militare e non ebbe incarichi di tipo politico né svolse
3) M. Cassetti-G. Bolengo, Mostra documentaria, Verattività nella società civile. Grande peso ebbero gli
celli 1986.p. 25.
intensi rapporti con i numerosi fratelli e sorelle, in
4) Archivio familiare conservato presso la Sezione di
particolare con Alberto, Alfonso e Carlo Emanuele,
Archivio di Stato di Biella. Archivio di Stato di Torino.
con cui condivise l’esperienza nell’Esercito.
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [18]
DE RE BIOGRÁFICA
VIDA Y FORTUNA DE D. JUAN MANUEL MANZANEDO GONZÁLEZ
I DUQUE DE SANTOÑA Y I MARQUÉS DE MANZANEDO
GRAN HOMBRE DE NEGOCIOS Y GRAN FILÁNTROPO
(1803-1882)
por D. Rafael Portell Pasamonte, del Colegio Heráldico de España y de las Indias
Don Juan Manuel de Dios
Manzanedo y González nació en
la calle de la Dársena en la localidad de Santoña (Cantabria) el 8
de marzo de 1803. Era hijo legítimo de don Ramón Manzanedo
de la Teja y de doña Ignacia González Delgado, naturales ambos,
también, de Santoña. Su nacimiento se inscribió en el registro
de la parroquial de dicha villa el
nueve siguiente, día de su bautismo, oficiando la ceremonia don
Ramón María del Hoyo, cura beneficiado de la dicha iglesia parroquial. Fueron sus padrinos don
Manuel Fonegra y doña María
Teresa Cerecedo, igualmente vecinos de Santoña.
importancia de los comerciantes
montañeses en Cuba quedó reflejada en el registro de la Matricula de Comerciantes establecidos en la isla, formado en 1833,
en la que figuraban los catalanes
con 373 comerciantes, seguidos
por 115 montañeses, y a bastante distancia los procedentes de
otras regiones españolas como
Galicia, Navarra, Andalucía, Asturias, etcétera.
Atraído por lo que se contaba
de los indianos retornados ricos
a la Península, o quizá, y es lo
más probable, por la escasa panorámica de alzarse con una situación económica, sino privilegiada, si al menos desahogada,
Armerías del Duque de Santoña
en el año de 1823, reinando Don
Procedía don Juan Maen
su
palacio
madrileño
Fernando VII, el joven Juan Manuel de una familia de hidalgos
nuel Manzanedo emigró a Cuba,
pobres, pero de ejecutoria ganay empezó a trabajar en La Habana, primeramente
da desde el siglo XVI, oriunda por parte paterna de
como sirviente y después como empleado en el cola villa de Noja, en aquel tiempo un pequeño munimercio de un primo suyo que estaba bien situado,
cipio cercano a Santoña. En efecto, sus abuelos pajunto al que estuvo durante once años.
ternos don Luis de Manzanedo y doña Ventura Petronila de la Teja, procedían del citado lugar. Su
Al cabo de ese tiempo se estableció por su
abuelos, por parte materna, don Francisco Gonzácuenta, distinguiéndose por su talento para el colez y doña Manuela Antonia Delgado, lo fueron asimercio, dedicándose a múltiples negocios: tabaco,
mismo de Santoña.
y caña de azúcar, préstamos hipotecarios, comercio
Muy joven, Manzanedo quedó huérfano de
padre, comenzando a trabajar de niño durante algún tiempo como aprendiz en una herrería.
En la primera mitad del siglo XIX, la isla de
Cuba constituía un autentico privilegio para aquellos que, con ingenio y capacidad para los negocios,
quisieran una oportunidad singular de hacer fortuna,
a partir del comercio, préstamos hipotecarios a criollos, comercialización de la zafra y, por supuesto,
expediciones negreras. Los comerciantes peninsulares en esa época dominaron el comercio cubano,
especialmente los catalanes y los montañeses. La
de compraventa de esclavos, etcétera, y asociándose con don Baltasar Mitjáns, un emigrante catalán que tenía una sociedad comercial llamada Mitjáns y Compañía. De esta manera, en poco tiempo
llegó a ser un gran hombre de negocios de La Habana, negocios que le llevaron a viajar por casi toda
América.
En la ciudad de La Habana obtuvo algunos
cargos, como el de representante en el Municipio, y
miembro del Tribunal de Comercio, y de la Junta de
Comercio.
Cuadernos de Ayala 76 -OCT/2018 [19]
En el año de 1842 tuvo deseos de volver a
España, pero antes viajó a Londres y a Paris, para
tratar con hombres de negocios y de la banca. En
Londres estableció contacto con la casa Baring
Brothers, con quien tendría grandes negocios en el
futuro.
En 1845 regresó definitivamente a España
con una fortuna calculada alrededor de unos cincuenta millones de reales, estableciéndose
primeramente en Cádiz, para
pasar después a residir a la
capital del Reino.
Prosiguó sus actividades mercantiles con diferentes
inversiones en Madrid y Toledo
y diversificó sus negocios: armador, construyó buques en
Galicia para el comercio con
Ultramar. Banquero, fue impulsor del Banco Hispano-Colonial y el Banco Santander, e
hizo negocios con la Banca
Rothschild y con otros banqueros franceses. Constructor,
edificó el muelle de Maliaño en
la ciudad de Santander, etcétera.
En su primera etapa de
negocios de esta época, figuró
como representante, asesor y
cabeza visible de inversores
hispano-cubanos interesados
en invertir su dinero en Europa, entre los que destacaban
las poderosas firmas Mitjáns y
Compañía, y Mariátegui.
arreglo a las condiciones publicadas en la Gaceta y
en los demás periódicos, se ha verificado la contrata de tabacos Virginia y Kentuqui para las fábricas
del reino en los años 1846, 1847 y 1848. Nueve
fueron las proposiciones presentadas que habiendo
satisfecho las condiciones del pliego, cubrían además el tipo de los 170 reales vellón por quintal.
Eran estas de los señores siguientes: D. José de
Salamanca, D. José Buchental, D. José Víctor Méndez, D.
Mamerto Oleaga, D. Juan Manuel Manzanedo, por D. Manuel María Calafat, D. Daniel
Weisweiler, D. Jaime Ceriola,
D. N. Paxot y D. Enrique Oshea y compañía. Se abrió la
subasta sobre el precio de 168
rs. quintal, ofrecido por el señor Méndez, y después de muchas pujas por espacio de tres
cuartos de hora, quedó el remate a favor del señor Manzanedo por 148 rs y 33 mrs.
quintal. La subasta pública ha
obtenido considerable ventaja,
comparada con el precio de
216 rs. que se paga actualmente y con el que se ha pagado siempre, si se esceptúan
casos particulares por partidas
cortas.
Doña Carmen Hernández y Espinosa de los
Monteros, Duquesa de Santoña
(óleo de Federico de Madrazo, depósito del
Museo del Prado en la Cámara de Comercio
e Industria de Madrid)
En realidad, la inmensa
mayoría de la fortuna que llegó a alcanzar la realizó
como importador de tabaco desde la isla de Cuba.
Su primer contacto en España con este tipo de negocios se realizó a finales del año 1845 y principios
del año siguiente. En efecto, en el mes de noviembre de 1845, la Dirección de Rentas Estancadas
convocó una subasta para la adquisición de tabaco
de hoja virginia y kentuqui para las fábricas del reino, en los tres años de 1846, 1847 y 1848. En su
conjunto se trataba de 21.000 barricas, a razón de
7.000 por año, divididos en dos plazos de entrega.
Con el triunfo se alzó don Juan Manuel,
apoyado por sus socios cubanos e ingleses. Así lo
relataba el Diario de Barcelona del 20 de enero de
1846:
Madrid 15 de Enero. SUBASTA DE TABACOS. Con
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [20]
A finales de 1845 y principios
de 1846 contribuyó, de forma
notable, a la creación de la sociedad El Ancora, según publicó el mismo Diario de Barcelona el 24 de febrero:
EL ÁNCORA
Sociedad mercantil anónima
de seguros marítimos, terrestres y de incendios.
Capital de la compañía cien millones de reales divididos en 25.000 acciones de a 4.000 reales cada
una. Señores que componen la junta de gobierno:
D. Fermín de Lasala, D. Antonio Felipe González;
D. Mateo de Murga, D. Francisco Javier Albert, D.
José Cano Sainz, D. Francisco de las Bárcenas, D.
Francisco Recur, D. Juan Alberto Casares, D. Nazario Carraquiri, D. Gonzalo José de Vilches, D. Pablo
Collado, D. Juan Manzanedo. Director, Excmo. Sr.
D. Manuel Antero; Subdirector, D. Blas Quintana del
Acebo. Comisionados en Barcelona, Durán Hermanos, calle Ancha núm 48.
Poco después estableció sociedad con don
Juan Alberto Casares, santanderino, recaudador
general de contribuciones directas de la provincia
de Toledo, con lo que poco a poco el mercado del
tabaco quedó prácticamente en manos de ellos.
Así también se alzaron con la contrata de 1847,
una de las más importantes del siglo, y que consistía en el suministro de 30.000 millones de cigarros
habanos, que el Gobierno pagaría con libranzas
del Tesoro. Por si no fuera bastante, también obtuvieron, en 1848, la contrata de
tabaco habano para los siguientes cinco años.
Conjuntamente, en el
año 1847, Manzanedo y Casares participaron, aportando cada uno un diez por ciento, en
la constitución de la firma Pablo Collado y Compañía, para
la adquisición y explotación de
una fábrica de tejidos de algodón e hilo en la provincia de
La Coruña. Esta compañía la
había constituido el también
santanderino Pablo Collado.
drid, vocal del Consejo Superior de Agricultura, Industria y Comercio, cónsul de la Tribuna de Comercio de Madrid, vocal de la Junta de Instrucción Primaria, y diputado a Cortes.
En la guerra de África (1859-1860) hizo numerosas donaciones, prestando sin interés y a reintegrarse el último, hasta dos millones de reales para gastos de guerra. Incluso
sostuvo a su costa, en dicha
campaña, una compañía de
cazadores de ciento seis hombres completamente pertrechados y con sus respectivos
jefes y oficiales.
Por su ayuda económica a
las víctimas de los temporales
en Filipinas y en Puerto Rico,
se le concedió entonces la
cruz de 1ª clase de la Orden
Civil de la Beneficencia.
En 1864, debido a su excelente reputación, la Reina Doña Isabel II le concedió la gracia del Marquesado de
Manzanedo, mediante real
decreto publicado en la Gaceta de Madrid:
En vista de tan excelentes resultados, Manzanedo
y Casares decidieron establecer una sociedad que se llamaría Manzanedo y Casares
Teniendo en consideración las
S.R.C. Esta sociedad se fundó
circunstancias y distinguidas
con un capital social de seis
cualidades que concurren en
millones de reales, participanDon Juan Manuel Manzanedo,
do Manzanedo con el 58 por
Diputado a Cortes, de acuerdo
ciento y Casares con el resto.
con mi Consejo de Ministros,
La forma jurídica adoptada fue
Vengo en concederle merced
Don Juan Manuel Manzanedo y González
la de sociedad colectiva, figude
titulo del Reino con la deMarqués de Manzanedo
rando en sus estatutos que les
nominación
de Marqués de
y Duque de Santoña
estaba prohibido a los socios la
Manzanedo, para sí, sus hijos
(óleo de Federico de Madrazo, depósito
realización de negocios partidel Museo del Prado en la
y sucesores legítimos habidos
culares. La sociedad tenía co- Cámara de Comercio e Industria de Madrid)
en constante matrimonio. Damo fines de negocio: el cumplido en Palacio a veinticuatro de
miento de los contratos que ya
Febrero de mil ochocientos sesenta y cuatro. Isatenían formalizados con el Gobierno, las operaciobel. El ministro de Justicia, Fernando Álvarez.
nes de banco y giro de letras y la concesión de
En los años de 1865-1866, ya figuraba copréstamos y descuentos. En el año 1852 se disolmo el quinto comerciante de la Península, según el
vió la compañía.
orden establecido por las cuotas satisfechas en
Tomó parte Manzanedo en la empresa feconcepto de subsidio industrial.
rroviaria de Santander a Alar del Rey, cuya consDurante su estancia en la isla caribeña, hatrucción comenzó en el año 1857.
bía tenido una hija natural llamada doña Josefa de
En fin, prácticamente no hubo actividad
Manzanedo e Intentas, habida de sus relaciones
económica o comercial en que no interviniera de alcon doña Luisa Intentas Serra. Esta hija fue reconoguna manera, el futuro Marqués de Manzanedo..
cida como hija legítima, a petición de don Juan MaComo, además, supo introducirse en la círnuel a la Reina Doña Isabel II, por rescripto regio y
culos del poder político y económico, pronto ocupó
real despacho de 21 de agosto de 1857, por el que
los cargos de concejal en el Ayuntamiento de Mala Reina resolvió:
Cuadernos de Ayala 76 -OCT/2018 [21]
Hacerla legítima, hábil y capaz para heredar los bienes de su padre, derechos y acciones como si hubiere sido habida y procreada en matrimonio legítimo y para que pudiera gozar de todos los efectos
civiles, usando mi Real Autoridad para alzar y quitar todo
defecto que por razón de su
nacimiento le pudiera ser
puesto, así en juicio como fuera de él, instituyéndola en todos los derechos, franquicias,
preeminencias y prerrogativas
que puedan y deban disfrutar
según las leyes del Reino los
hijos naturales legitimados por
rescripto regio.
Doña Josefa Manzanedo había contraído matrimonio
con don Francisco de Paula
Mitjáns y Colinó, natural de La
Habana e hijo del antiguo socio de don Juan Manuel. De
esta unión nacieron cuatro hijos.
De Real orden lo digo a Vd. para su inteligencia,
satisfacción y efectos correspondientes.
El 23 de noviembre de 1864 se efectuó la
concesión del proyectado ferrocarril de León a Gijón, a don
Manuel de Manzanedo, por
190 millones de reales. El 1º
de diciembre, Manzanedo traspasó la concesión a don José
Ruiz de Quevedo, con un sustancial beneficio económico.
Según consta en su expediente personal del Palacio
Real de Madrid, el 12 de febrero de 1865, fue nombrado gentilhombre de cámara de la Reina Isabel II, con ejercicio y con
la dispensa del pago de la media annata, a través de don
Francisco Javier Castaños y
Aragorri, Duque de Bailén. El
juramento preceptivo tuvo lugar ante el Marqués de Malpica el 3 de abril de 1865.
Nada más haberle sido
Hacia el año 1870, se consiconcedido el Marquesado de
deraba que su fortuna rondaba
Manzanedo, elevó nueva inslos 179 millones de reales, lo
tancia a la Reina, con fecha 17
que la situaba como una de las
de marzo de 1864, para que
más elevadas de Madrid, y poesta autorizase a su hija y a
siblemente de toda España. El
sus descendientes legítimos,
patrimonio que había generapara poder recibir, en su día, el
do en Cuba y desarrollado en
Marquesado ya que no había
Josefa Manzanedo e Intentas
España, a través de su casa
sido tenida en constante matriII Marquesa de Manzanedo
de comercio en La Habana, se
monio. Alegaba para ello que
(óleo de Raimundo de Madrazo,
sirvió de cuatro formas de acuen el Museo del Prado)
el hombre que como yo llega
mulación de capital, interrelaal último tercio de su vida, no
cionadas entre sí: préstamo de
vive más que en sus descendientes: cuanto tengo y
utillaje a los propietarios de ingenios relacionados
pueda adquirir en fortuna y en honores, perdería a
con la zafra; préstamos hipotecarios a tasas de inmis ojos mucha parte de su valor, si no pertenecietereses superiores a los peninsulares; comercializara, como a mí, a mí hija y a mis nietos.
ción directa del azúcar; y financiación de expediciones negreras.
A esta petición se le contestó que Su Majestad le concedía igualmente esta nueva gracia:
Según relata Benito Pérez Galdós en sus
Episodios Nacionales - Amadeo I, en la entrada de
Madrid 30 de Julio de 1864. La Reyna (q.D.g.), acDon Amadeo I de Saboya en la capital de España,
cediendo a la solicitud de Vd., de acuerdo con el
el 1º de enero de 1871, en los balcones de la resiConsejo de Ministros, se ha servido mandar que se
dencia del Marqués de Manzanedo no se habían
expida una Real Cédula especial habilitando a su
puesto colgaduras, en clara señal de rechazo hacia
hija natural, legitimada por Real rescripto, doña Joel nuevo monarca. El diario El Imparcial, en franca
sefa Luisa Manzanedo e Intentas, para suceder, y
oposición a este signo de desaprobación, publicó
en defecto de descendientes de legítimo matrimouna reseña en la que decía, entre otras cosas, que
nio, a su tiempo en el Título de Marqués de Manzael Marqués debía ostentar en los florones de su esnedo que Vd. disfruta y transmitirlos sus hijos y sucudo tabaco Virginia o Kentuky y algunas motas de
cesores legítimos habidos en constante matrimonio.
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [22]
ébano, que representarían la compra-venta de esclavos en Cuba. No obstante, tal vez sin saberlo, o
tal vez separando los negocios de los ideales políticos, don Juan Manuel, participó en operaciones de
adelantos al Tesoro
durante los años 1871
y 1873, que supusieron un gran apoyo al
nuevo régimen político que se había establecido en España.
el obispo don Simón de Rentería; don Joaquín Gómez; don José Francisco de San Juan, y otras personalidades de la citada villa.
Fue encomendada
esa primera etapa de
la historia docente a
la congregación religiosa de los Hermanos de las Escuelas
Cristianas (Hermanos
de la Salle), bajo la dirección de don Juan
Manuel de Orti y Lara.
En su Santoña
natal, apoyó económicamente la construcDentro del colegio, en
ción de la dársena;
el testero de la escapromovió, entre 1861
lera, se colocó una láy 1871, la construcpida escrita en latín,
ción del Colegio de
que decía:
San Juan Bautista
STELLAE MARIS AC
(hoy Instituto de EnSantoña: Colegio de San Juan Bautista
BONI PORTUS VIRseñanza Secundaria),
fundación del Marqués de Manzanedo
GINI / DEI MATRI INque fue uno de los
y panteón de sus descendientes y sucesores
MACULATAE MARI
mejores de la época; (hoy Instituto de Enseñanza Secundaria Marqués de Manzanedo
AE / hoc a se exstrcy también del Hospitum a fundamentis cotal de Santa María del Puerto (hoy desaparecido),
llegium auspice divo / Iohanne Baotista Iohannes
con una capacidad de al menos doce camas para
Emmanuel a Manzanedo et / Gonzalez primus a
enfermos pobres de Santoña.
Manzanedo marchio d.d. / Heic ubi nascenti cunaEl edificio del Colegio de San Juan Bautista
bula prima fuere / urna sepulchralis sit mihi quum
fue construido con muros exteriores de sillería. En
moriar / Illa meos tegat ac cirenes utriusque parensu interior posee una capilla privada y un panteón
tis / quis pia paupertas nobile stemma dedit / At voc
donde están enterrados miembros de la familia del
o pueri quos heic sapientia nutrir / provida gratuito
Marqués. La fachada principal es de corte neoclásimatris ad instar amans / dicite quid sit amor patriae
co y forma parte de la misma un observatorio astroquid in ardua tendens / virtus ac pro me fundite quanómico, y un gran reloj que culmina el edificio. Para
eso preces / Dicatum Santoniense Collegium dub
hacer el colegio se compró al Marqués de Chiloedie VIII kal Iulias / anno salutis MDCCCLXXI aetatis
ches un palacio que existía en dicho lugar, con sus
veri fundatoris LXVIII.
huertas. Fue dotado con una renta de 4.000 pesos
Al lado se colocó otra lapida con la traducanuales, y la hipoteca de muchos inmuebles de la
ción al castellano de la primera, con algunos añadipropiedad del Marqués en Madrid, así como un modos:
lino harinero en San Martín de Valdeiglesias. En esA MARIA SANTÍSIMA DEL PUERTO / CLARA ESte colegio debían recibir enseñanza gratuita cinTRELLA
DE LA MAR / VIRGEN MADRE DE DIOS
cuenta niños pobres naturales de Santoña, y si
INMACULADA
/ ofrece este colegio en Santoña,
hubiese plazas disponibles se completarían con nibajo la advocación del / divino precursor San Juan
ños de los pueblos limítrofes.
Bautista, Juan Manuel de / Manzanedo y González,
El 24 de junio de 1871 se celebró la inauguprimer marqués de Manzanedo / Aquí, en el dulce
ración el Colegio. Ese día, Santoña amaneció comamado suelo en / que se meció mi desvalida cuna,
pletamente engalanada. A la entrada de la villa se
álcese / también mi urna sepulcral, luego que yo /
había alzado un arco de triunfo, con las siguientes
desaparezca de entre los vivos / Ella guarde fiel mis
inscripciones, una a cada lado: Santoña a los forascenizas y juntamente / las de mi padre y mi madre,
teros, y Santoña al Marqués de Manzanedo. A las
cuya noble / corona fue la piadosa pobreza / Pero
ceremonias y actos que tuvieron lugar, asistieron el
vosotros, oh niños, á quienes / aquí la Sabiduría
Marqués de Manzanedo; su hija doña Josefa; su
prodigará gratuitos sus / tesoros, cual una madre
marido don Francisco de Paula Mitjáns; los cuatro
cariñosa, no olvideis que todo me faltó a mí, y que
nietos del fundador Juan, Agustina, María y Josefa;
todo / humanamente me lo debo / Y cuando aprenCuadernos de Ayala 76 -OCT/2018 [23]
dáis cuál ha de ser el / santo amor de patria, y cómo la virtud ha / de aspirar a lo grande, a lo noble, a
lo / inmortal, no a lo caduco, pagadme con / muy
afectuoso recuerdo pidiendo a Dios / por mi / Dedicóse el día 24 de Junio de
1871 / sexagésimo octavo de
la edad del fundador.
La fundación efectiva
del mismo se llevó a cabo por
su hija el día 15 de marzo de
1924, para dejar enteramente
cumplida la voluntad de su padre.
También mandó, por
estas fechas, construir en Santoña un palacio, como residencia veraniega, siéndole encargado el proyecto al arquitecto
Antonio Ruiz de Salces, que lo
diseñó en un estilo neoclásico,
siendo terminado en 1873. Estaba dividido en dos edificios,
el palacio propiamente dicho y
las cocheras. Este edificio fue
adquirido en la década de
1980 a 1990 por el Ayuntamiento de Santoña.
Monteros en la iglesia parroquial de San Sebastián
de Madrid, el 18 de diciembre de 1873. Por exigirlo
las leyes en vigor, el 5 de enero del año siguiente,
lo efectuaron civilmente en el Juzgado del Distrito
de Congreso, ante el Juez don
Antonio Coin y Martín, figurando como testigos don Gabriel
Manzanedo y González (hermano del contrayente), y don
Gabriel Costés y Aceval. Los
contrayentes vivían en la calle
de Alcalá número 12 y en la
Carrera de San Jerónimo número 28, respectivamente.
Palacio de la Duquesa viuda de Santoña
en la calle de Montalbán 12
hoy Museo Nacional de Artes Decorativas
El 13 de diciembre de 1871, el Marqués de
Manzanedo lideró, junto con el antiguo capitán general de Puerto Rico don José Laureano Sanz, la
fundación en Madrid del Centro Hispano Ultramarino. Podían ingresar en el mismo tanto políticos como intelectuales, pero con la condición de que el interesado hubiese residido en las Antillas y
regresado a la Península, manteniendo negocios en
ambos lados del Atlántico. Su objetivo era impedir
que el Gobierno cambiara la ley Moret o acuerdo de
1869, consistente en no hacer reformas en Cuba
hasta que, restablecida la paz, llegasen a España
sus representantes. Además defendía la unidad nacional, la propiedad, la familia y a religión. No se
identificaba con partido político alguno, pero era de
tendencia conservadora.En el periódico El Diario
Español, con fecha 1º de diciembre de 1872, publicaron un artículo con el nombre Exposición que al
Gobierno de S. M. dirige el Centro Ultramarino de
Madrid.
Por estas fechas don Juan Manuel se encontraba muy solo, pues permanecía aún soltero, y
su hija residía en Paris con su esposo y sus hijos,
ya que este se encontraba al frente del negocio
bancario familiar establecido en París.
En esa época contrajo matrimonio con doña
María del Carmen Hernández y Espinosa de los
Cuadernos de Ayala 76- OCT/2018 [24]
de todo ello.
Cómo
se
conocieron?
¿Quién les presentó? ¿Cómo
entablaron la amistad que les
llevaría al matrimonio?. Tal vez
en alguna velada artístico-literaria, a que era tan proclive la
alta sociedad del último tercio
del siglo XIX. Tal vez en las carreras de caballos, a las que
era ella muy aficionada. Tal
vez en algún teatro. Tal vez, y
es lo más seguro, una mezcla
Doña María de del Carmen Josefa Victoriana Hernández y Espinosa de los Monteros,
había nacido en Motril (Granada) el 25 de marzo de
1828. Era hija legítima de don José Hernández
Guerrero y de doña María del Carmen Espinosa de
los Monteros y Burgos. Era nieta, por parte paterna,
de don Simón Hernández Moreno y de doña María
Teresa Francisca del Carmen Guerrero y Ribas, y
por la materna de don José Espinosa de los Monteros y de doña María Josefa Burgos y Olmos. Todos
los citados eran naturales del precitado Motril.
Según un retrato suyo realizado por Federico Madrazo (que se encuentra actualmente en el
Museo de Bellas Artes de Álava, cedido por el Museo del Prado, luciendo la banda de la Orden de
Damas Nobles de la Reina María Luisa), doña María del Carmen era de escasa hermosura, más bien
entrada en carnes y de rostro algo adusto. Por el
mismo retrato se puede apreciar su amor e interés
por las joyas.
Doña Carmen era de temperamento impulsivo, a diferencia del temperamento sosegado y pragmático de don José Manuel. Poseía una amplia colección de pinturas, además de una cuadra con
caballos ingleses de pura raza; pero, sin embargo,
no poseía los suficientes recursos económicos para
mantener el elevado nivel de vida que practicaba.
Había contraído un primer matrimonio en
Motril (Granada), el 26 de febrero de 1846 con un
capitán de Caballería llamado don José de Heredia
y Ruiz de la Cámara, nacido en Daimiel (Ciudad
Real) el 31 de octubre de
1812, hijo de don Manuel
de Heredia y de doña
Magdalena Ruiz. Al cabo
de cierto tiempo, abandonó a su esposa, sin
pasarle pensión alguna,
que esta reclamó insistentemente. Llegó a ser
comandante del Arma citada el 30 de junio de
1854, por méritos de
guerra, y se retiró del
Ejército el 31 de agosto
de 1863, a petición propia, por haber sido nombrado a la sazón inspector de Estadística de
Cádiz. Falleció en Madrid
el 24 de enero de 1873,
a consecuencia de un
cáncer de lengua. De este matrimonio nació un
hijo llamado don José e
Heredia y Espinosa de
los Monteros, que le daría tres nietas.
compra se hubo realizado, pocas semanas más tarde, firmó ante notario las escrituras del mismo a
nombre de doña Carmen Hernández. Quien inició
una serie de reformas en el palacio, llamando a los
mejores pintores, escultores y artesanos de la
época, que convirtieron
el edificio en una maravillosa y lujosa residencia.
Don Juan Manuel de
Manzanedo fue un firme
valedor de la institución
monárquica, apoyando al
futuro Don Alfonso XII en
la contienda carlista, poniendo sus influencias y
sus caudales al servicio
del Estado cada vez que
fue preciso, y apoyando
las acciones emprendidas para erradicar brotes
insurreccionales cubanos. Todo ello le valió la
íntima amistad del futuro
Rey.
El 11 de marzo de
1875, después sostener
varias conversaciones
con el señor Homedes,
sobrino del general carlista don Ramón de CaEl día 31 de dibrera, apodado El Tigre
ciembre de 1873, el Mardel Maestrazgo, que se
Doña Josefa Manzanedo e Intentas, II Marquesa de
qués de Manzanedo forencontraba exiliado en
Manzanedo (óleo de Meisonnier, Museo del Prado)
malizó un inventario de
Londres, con don Juan
su situación económica
Manuel Manzanedo y
personal, que arrojó un capital liquido de
González, el diplomático Rafael Merry del Val y el
139.659.124, 29 de reales.
señor Pareja Alarcón, el general carlista reconoció
Doña María del Carmen supo luego que se
como Rey a Don Alfonso XII, en lo que se ha denoencontraba en venta un palacio que había perteneminado Acuerdo o Acta de Paris. Cabrera dirigió la
cído a los Goyeneche. Dicho palacio estaba situado
siguiente carta a Don Alfonso XII:
en la calle del Príncipe, esquina a la calle de las
Señor:
Huertas, con una superficie de 3.466 pies cuadraEn la bandera con que los españoles endos. Así que pidió a don Juan Manuel Manzanedo,
grandecieron los reinados de los antecesores de
como regalo de bodas, en concepto de arras, que
V.M., hay tres principios santos: Dios, Patria y Rey.
adquiriera el citado palacio, a lo que accedió gustoYo los he profesado siembre y los profesaré mienso ante la petición de su pronta esposa, comprántras viva. Por salvarlos y contribuir a su Tradición
doselo a don Juan Francisco Chacón, Marqués de
yo, por devolver a España la paz que sus desdichas
Isasi, en representación de su madre, según escrireclaman con urgencia, acudo gustoso a depositar
tura pública otorgada el 4 de abril de 1874 ante el
en manos de V.M. el homenaje de mi respeto y el
notario de Madrid don Juan Perea (inscribiéndose
testimonio de mi adhesión y lealtad.
al folio 186 vuelto, tomo 573, finca núm 1.912, insReconozco a V.M. como Rey de España,
cripción 11, con fecha 17 de Julio de 1874).
como mi Rey y soberano; y al realizar este acto que
Además, para evitar, que el Palacio fuese a
me aconsejan mi conciencia y mi patriotismo, hago
parar a manos de su hija doña Josefa, cuando la
Cuadernos de Ayala 76 -OCT/2018 [25]
sinceros votos porque el Cielo conceda a V.M. la
gloria de restaurar la grandeza, el carácter y las virtudes que siempre fueron el distintivo del pueblo español y la gloria de sus Monarcas.
aquellos tiempos Madrid ciudad de la muerte, no
existiendo ningún hospital infantil.
En el año 1876, con el beneplácito del Duque de Santoña, su esposa doña María del Carmen, consiguió que una real orden del 26 de marzo
Dios guarde muchos años la preciosa vida
la autorizase a fundar hospitales de niños en Made V.M. Paris, once de Marzo de 1875. Señor:
drid y otros puntos de la peA.L.R.P. de V.M., Ramón
nínsula. Para poder desaCabrera.
rrollar mejor sus proyectos,
A S.M. el Rey Don Alfonso
fundó y presidió la AsociaXII
ción Nacional para la FunCuando Don Alfonso
dación y Sostenimiento de
XII accedió al trono, conceHospitales de Niños en Esdió al Marqués de Manzapaña. Este esos proyectos,
nedo la Grandeza de Esquizá el más importante fue
paña y además el título de
la construcción y sosteniDuque de Santoña, memiento de un hospital en
diante real decreto de 20 de
Madrid, para niños pobres,
enero de 1875, y carta de
y que se llamó Hospital del
22 de marzo de 1875:
Niño Jesús, que se situó
Teniendo en consideración
en un principio en la calle
El Hospital del Niño Jesús en Madrid
las especiales circunstandel
Laurel número 23 y fue
primer centro pediátrico en España
cias que concurren en Don
abierto
a los enfermos el 14
fundado por la Duquesa de Santoña en 1880
Juan Manuel Manzanedo y
de enero de 1877, contando
González de Teja y Delgacon medios modernos de
do. Marqués de Manzanedo, y queriendo darle una
pediatría, cirugía y oftalmología. El hospital fue coseñalada prueba de Mi Real Aprecio con motivo de
nocido con el nombre de el Hospitalillo.
Mi advenimiento al trono, de acuerdo con el parecer
Como este hospital se hiciera pequeño, en
del Consejo de Ministros, Vengo en concederle la
vista de los excelentes resultados médicos, se efecGrandeza de España con la denominación de Dutuaron los estudios preliminares para su ubicación
que de Santoña para sí, sus hijos y sucesores y faen otro lugar que reuniera mejores condiciones y
cultándole para que pueda designar entre aquellos
fuera más amplio. Para ello se eligieron unos terreel que haya de sucederle en la espresada. Dado en
nos situados detrás de los jardines del Buen Retiro.
Zaragoza a veinte de Enero de mil ochocientos seLa compra de los mismo se efectuó por escritura
tenta y cinco. Yo el Rey. El Ministro de Gracia y Juspública del 14 de mayo de 1879, ante el notario don
ticia, Francisco de Cárdenas.
Mariano García Sancha, y se encargó el proyecto al
En el decreto anterior no deja de llamar la
arquitecto don Francisco Jareño. El 1º de julio de
atención la facultad expresa que se le otorga de de1878 se encargó a las Hijas de la Caridad de San
signar sucesor en el título de Duque. ¿Tal vez porVicente de Paul el cuidado de los niños enfermos.
que en esta época las relaciones con su hija estaEl 6 de noviembre de 1879, el Rey Don Alban tirantes?. La realidad es que le sucedió en el
fonso XII colocó la primera piedra del futuro edifiDucado su nieto don Juan Manuel Mitjáns y Manzacio, asistiendo al acto, entre otras personalidades,
nedo.
la Princesa de Asturias, el obispo auxiliar de Madrid,
Los honores y reconocimientos reales se suel gobernador civil de Madrid, y destacados profecedían en el matrimonio; así el 19 de abril de 1875,
sores médicos del momento. El 1º de diciembre de
doña María del Carmen, fue designada dama de la
1881 comenzó a funcionar el nuevo Hospital. DisReal Orden de Damas Nobles de la Reina María
ponía de 60 camas, y el quirófano estaba equipado
Luisa.
con los más modernos aparatos
La situación sanitaria en esta época en EsEn su construcción y sostenimiento no interpaña era muy deficiente. Se calcula que por esta
vino de forma directa el Marqués de Manzanedo;
época el 25 por ciento de los niños nacidos no supero, no obstante, pagaba una suscripción mensual
peraban el año de vida, y más del 40 por ciento no
de 200 reales. Sin embargo, la Duquesa de Santopasaban de la edad de cinco años. En Madrid la
ña debía presentarle las cuentas de los gastos que
mortalidad era tan alarmante que fue llamada en
realizaba, con una periodicidad semestral.
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [26]
El 2 de agosto de 1878 se autorizó una Rifa
de carácter nacional, cuyos beneficios irían destinados al sostenimiento del Hospital del Niño Jesús.
MUERTE DEL DUQUE DE SANTOÑA. Esta mañana, a las ocho y cuarto, ha muerto en el pueblo de
Santoña, víctima de una rápida enfermedad, el Excmo. Sr. D. Juan Manuel ManzaneDon Juan Manuel Manzado, marqués de Manzanedo y dunedo y González, Duque de Sanque de Santoña. La enfermedad,
toña y Marqués de Manzanedo,
como decimos, ha sido tan rápiGrande de España, falleció en su
da, que anteayer la anunciaron alSantoña natal el sábado 19 de
gunos periódicos y hoy llega a
agosto de 1882, a las ocho de la
Madrid
la triste noticia de su
mañana, de una pronta y rápida
muerte. Manzanedo era de las fienfermedad que le fue paralizanguras más conocidas de estos
do progresivamente el cuerpo. El
tiempos.
Desde una posición hudía anterior al óbito le fueron admilde consiguió encumbrarse a
ministrados los últimos sacramenuna
altísima, y logró reunir una
tos.
fortuna que algunos hacen subir a
No tuvo descendencia de
los 400 millones de reales. ¡Cuánsu matrimonio.
to trabajo, cuantos afanes, cuanta
Los periódicos de la époconstancia y cuanta suerte se neca recogieron el luctuoso trance,
cesita para ello!. En 1864 fue
de los que reproduzco únicamenagraciado con S. M. la Reina con
te los siguientes:
el título de marqués de ManzaneEsquela mortuoria del
do, y en 1875 con el de duque de
primer Duque de Santoña
El fallecimiento del Duque de Sanaparecida
en
el
diario
El
Imparcial
Santoña con grandeza de primera
toña, Marqués de Manzanedo,
clase. Alguna vez los Gobiernos
ocurrido en la población de que
acudieron a las arcas del poderoso banquero en
tomó nombre ducado, es un suceso fúnebre imporbusca
de anticipos. Concluido el palacio-museo de
tante. Ha muerto el hombre que tenía para el vulgo
la calle del Príncipe, las recepciones de los duques
la representación de la riqueza. Otros capitalistas
de Santoña fueron verdaderos acontecimientos en
hay en Madrid, acaso más opulentos, pero de mela vida madrileña. Descanse en paz el hombre intenos fama entre las gentes que no tienen dinero. El
ligente y el trabajador infatigable, que solo a su proDuque de Santoña había adquirido su riqueza y su
pio esfuerzo debió el ser el Craso español. Acomposición por esfuerzo propio, yendo a La Habana
pañamos a su familia en su justo dolor (en La
muy joven y ejerciendo la honrada profesión de
Época del 19 de agosto de 1822).
sombrerero: pero su inteligencia en los negocios le
hizo abandonar aquella industria limitada y acomeEn su testamento, consignó su deseo de
ter vastas empresas, en las cuales reunió un fuerte
que sus cenizas reposasen en el panteón que decapital, que le dio gran influencia, y, como era natubía construirse en el Colegio San Juan Bautista, de
ral, la aristocracia del dinero, tan legítima como
Santoña.
cualquier otra y más positiva que ninguna, fue recoSe calcula que al morir dejó una fortuna sunocida oficialmente. El Sr. Manzanedo había fundaperior a los 2.000 millones de reales. Así se recoge
do un colegio magnífico en Santoña, y otras obras
en el párrafo primero del laudo de la Testamentaria:
benéficas. Cada vez que daba un baile en el sun1º Que el caudal inventariado perteneciente a la sotuoso palacio de la calle del Príncipe, se disputaban
ciedad legal de los Excmos. Sres. Duques de Sanlos billetes los aficionados a lo espléndido. El gasto
toña,
debe ser de 34.215.379,23 pesetas, el capital
de estas fiestas suponía un capital. Ha muerto a la
reintegrable
al finado Sr. Duque de 18.623.572,54;
edad de setenta y nueve años. Los cálculos que halas bajas generales del cuerpo de hacienda,
cen del capital que deja no bajan de cuatrocientos
29.952.758,95;
los gananciales líquidos, deducidos
millones de reales, que algunos elevan hasta mil.
el
lecho
nupcial
que se estima en 5.000 pesetas, de
Pagando la limosna de diez reales, se podrían decir
4.257.620,28; la participación de cada cónyuge en
cuarenta millones de misas por su alma, y acaso el
estos gananciales, de 2.128.810,14; el haber líquido
doble. Ayer nos hubiera podido dar limosnas de cindel finado, de 20.752.382,68; el quinto corresponcuenta o cien mil duros. Hoy le podemos hacer una
diente a la viuda, de 4.150.476,53; la carga de este
caridad nosotros con solo rezarle un padrenuestro.
quinto para el sostenimiento de la fundación SantoDios le haya perdonado (en La Ilustración Española
ña, de 694.000; el haber de la viuda por todos los
y Americana, número 31 del 22 de agosto de 1882).
Cuadernos de Ayala 76 -OCT/2018 [27]
conceptos, de 15.030.468,57; el de la heredera de
16.601.905,1; y la hijuela de deudas y gastos de la
testamentaría de 1.889.004,51.
Como ejemplo de la evolución de su fortuna,
se puede ver el siguiente cuadro de lo pagado por
el Duque, en Madrid, en
concepto de Contribución Territorial Urbana,
años de 1856, 1871 y
1882, y comparado con
los que le seguían en
cuantía tributaria. Las cifras son en pesetas de
la época:
cual, en el que confirmó y ratificó sus anteriores disposiciones testamentarias, así como que legaba el
quinto de sus bienes a su esposa, asignándole expresa y preferentemente para su pago los que tenía
en Santoña, con la condición de establecer un capital y renta correspondiente para el sostenimiento del Colegio de
San Juan y del Hospital
de la Virgen del Puerto.
Con la muerte del Duque, su viuda fue objeto
de una dura y lastimosa
prueba, que comenzó en
el mismo lecho de muerDuque de Santoña:
te
de don Juan Manuel.
1.307 (1856), 68.717
Así
lo manifiesta la du(1871) y 116.767 (1882).
quesa viuda de Santoña
Marqués de Linares (don
en su Expoliación escanJosé Murga): 24.410,
dalosa....: Se presentó
60.692 y 75.478.
(doña Josefa ManzaneDon José Fontagud y
do) el día 16 de Agosto
Gargollo, 1.941, 9.633 y
Palacio de los Duques de Santoña en Madrid
en Santoña, acompaña48.404.
en las calles del Príncipe y de las Huertas
da de sus hijos y de don
Abajo,
la
escalera
de
honor
Ramón Errazu, causa de
Don Romualdo de Césla separación de Mitjáns
pedes, 1.900, 12.254 y
de su mujer, instalándose los
47.908.
dos a la cabecera de la cama
Don Domingo Angulo Gutiédel moribundo, lo que segurarrez, 2.068, 12.124 y 30.434.
mente apresuró su muerte.
Fue senador del ReiEn efecto, la hija del ya falleno en las siguientes legislatucido Duque interpuso una deras: Senador vitalicio, desde
manda
para reclamar la totali1864 a 1868; senador por la
dad
de
la herencia de su
provincia de Santander, en
padre, lo que dio lugar aun
1871-1872 y 1876-1877; y de
largo
proceso que duró diez
nuevo senador vitalicio (por
años,
saliendo la sentencia
derecho propio), desde 1877
favorable
a doña Josefa, lo
a 1882, en que falleció.
que provocó la ruina econóEstuvo en posesión
mica de doña Carmen Herde las grandes cruces de las
nández, que fue desposeída
Órdenes de Carlos III, de Isade todo cuanto tenía y le habel la Católica, y de la civil de
bía testado su difunto esposo,
Beneficencia.
incluidos el Colegio de San
Había otorgado testamento el 6 de mayo de
Juan y el Hospital de Santoña, en contra de lo tes1862, en Madrid, ante el notario don José María de
tado por el propio finado.
Garamendi, instituyendo por heredera única y uniEl 27 de noviembre de 1889, el Estado se
versal a su única hija. Una memoria ológrafa del 1º
incautó del Hospital del Niño Jesús, encargando su
de febrero de 1882, declaraba ser su voluntad que
administración y cuidado a la Junta Provincial de
sus herederos, testamentarios y albaceas respetaBeneficencia de Madrid.
sen y cumpliesen en todas sus partes la escritura
Por si fuera poco para doña Carmen, don
de arras y asignación de alfileres que había otorgaJosé
Canalejas,
presidente del Consejo de Minisdo a favor de su esposa. Y un codicilo del 15 de
tros, convenció a don Enrique Parella, importante
agosto de 1882, ante el notario don Emiliano Pasacreedor de la Duquesa viuda, para que embargase
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [28]
a esta el palacio de la calle del Príncipe, como liquidación de la deuda. Una vez efectuado el embargo,
el edificio le fue vendido
a don José Canalejas y
a su cuñada doña Rosa
Saint Aubin, a muy buen
precio; quienes pasaron
a habitarlo en 1893.
El último testamento de doña Carmen
fue otorgado en la villa
y corte de Madrid el 30
de abril, ante el notario
Don Francisco Moragas.
BRE DE CÁMARA DE S.M. CON EJERCICIO.
GRAN CRUZ Y COLLAR DE CARLOS III, GRAN
CRUZ DE LAS ORDENES DE YSABEL LA
CATÓLICA Y DE BENEFICENCIA. NACIÓ EL 4
DE MARZO DE 1803.
FALLECIÓ EL 19 DE
AGOSTO DE 1882.
R.I.P.
Croquis del panteón de los Duques de Santoña
en el Colegio de San Juan Bautista
hoy I.E.S. Marqués de Manzanedo
Doña María del
Carmen Hernández y
Espinosa de los Monteros, Duquesa viuda de Santoña, falleció en Madrid
el 14 de octubre de 1894, a las dos y cuarenta y
cinco minutos de la tarde, en su domicilio de la calle Olózaga 5 y 7, cuarto 2º izquierda, a consecuencia de una hipertrofia cardiaca por lesión valvular. Fue sepultada en el cementerio de San
Isidro de Madrid.
Antes de morir, publicó en 1894 un extenso
memorial, titulado Expoliación escandalosa. Historia del laudo dictado en la Testamentaria de la
Excma. Sra. Duquesa de Santoña por los señores
Gamazo y Azcárate.
Digamos, para concluir, algo acerca del
panteón familiar de los Duques de Santoña en la
capilla del Colegio de San Juan Bautista, en dicha
villa, y de los personajes enterrados en él, según
el croquis adjunto y las respectivas lápidas identificativas:
Nicho A: Aquí yace la Excma. Sra. Doña JOSEFA
MANZANEDO E INTENTAS, MARQUESA DE
MANZANEDO, Dama Noble de la Orden de María
Luisa etc. Fallecida en Madrid el 1 de Enero de
1923. Quien continuó espléndidamente, como hija
amantísima, la hermosa obra de fundación. de este Colegio y Santo Hospital del gran patricio Excmo. Sr. D. Juan Manuel Manzanedo y González,
Marqués de Manzanedo, y Duque de Santoña, natural de este noble pueblo. R.I.P.. Sus hijos no la
olvidan.
Nicho B: EXCMO.SR. D. JUAN MANUEL MANZANEDO Y GONZÁLEZ, FUNDADOR DE ESTE COLEGIO, DUQUE DE SANTOÑA, MARQUÉS DE
MANZANEDO, GRANDE DE ESPAÑA DE 1ª
CLASE, SENADOR DEL REINO GENTILHOM-
de Abril de 1967.
Nicho C: Excmo. Sr. D.
Juan Manuel Mitjans y
Lopez de Carrizosa, Duque de Santoña, Marqués de Santurce, Nació
en Santander el 5 de
Septiembre de 1917.
Falleció en Madrid el 10
Nicho D: El Excmo. Sr. D. Juan Manuel Mitjans y
Murrieta. Duque de Santoña, Grande de España,
Gentil-Hombre de Cámara de S.M. Alfonso XIII,
con ejercicio y servidumbre Gran Cruz de Beneficencia, Cruz Roja del Mérito Militar, etc. Hijo predilecto de Santoña. Nació en Londres el 11 de Noviembre de 1891 y falleció en Madrid el 7 de Abril
de 1965.
Nicho E: Carmen L. de Carrizosa y Martel (Mimi)
Duquesa Vda. de Santoña. Nació en Córdoba el
29 de Mayo de 1894 falleció en Madrid el 20 de
Noviembre de 1979.
Nicho F: La Ilma. Sra. Doña María Mitjans y Manzanedo, Condesa de Rincón. Nació en Paris 1867
y falleció en Madrid 1940.
Nicho G: El Excelentísimo Señor Don Juan Manuel Mitjans y Manzanedo, Duque de Santoña,
Grande de España, Gentil-Hombre de Cámara de
S.M. con ejercicio y servidumbre, Gran Cruz de
Carlos III, Gran Cruz de la Corona de Italia etc.
Nació en Santoña el 8 de Agosto de 1865 y falleció el día 10 de Septiembre de 1929.
Nicho H: Clarita de Murrieta y Bellido, Duquesa de
Santoña. Nació en Londres el 9 de Julio de 1866.
Murió en el Señor después de haber recibido los
Santos Sacramentos en Madrid el día 10 de Junio
de 1900 a las 5-12 de la mañana.
Notemos que no están sepultados en esta
cripta-panteón ni la despojada doña María del
Carmen Hernández Espinosa, Duquesa viuda de
Santoña; ni doña Luisa Intentas Serra, madre de
la segunda Marquesa de Manzanedo; ni su esposo don Francisco de Paula Mitjáns y Colinó.
Cuadernos de Ayala 76 -OCT/2018 [29]
DE RE PREMIAL
UNA TORPEZA DEL
EXCMO. SEÑOR DUQUE DE SANTA ELENA
por el Dr. Marqués de la Floresta, comendador de la Orden de Carlos III
El 13 de octubre de 2018, don
Alfonso de Borbón y
Sanchiz, Duque de
Santa Elena, ha casado en Carmona
(Sevilla) a una de sus
hijas, con un maestrante de Sevilla.
Boda de mucho tronío y alto
copete, en la que el
bueno del Duque no
ha tenido más feliz
ocurrencia, para adornarse, que lucir públicamente la placa y
la banda de caballero del collar de la
Real y Distinguida
Orden Española de
Carlos III.
¿O quizá tan solo ha
querido disfrazarse
para darle un tono de
ridiculez a la boda de
su hija? No creemos
que haya querido
pasar por un payaso,
pero ha sido bobada.
En fin, ¿es
que no le basta con
ser todo un Borbón,
un Duque, un Grande
de España, un maestrante de Ronda? ¿O
solo es un grandísimo
ignorante de estas
cosas tan serias?
No nos gusta
reprender a nadie, no
nos es nada grato,
menos a un hombre
hecho y derecho, y
Que, obvio es
menos aún en públidecirlo, está reserco. Pero es que la
vada a Personas
torpeza, que conlleva
Don Alfonso de Borbón y Sanchiz
Reales y a Jefes de
una falta de respeto
Duque de Santa Elena, Grande de España
Estado, y por eso Su
al Rey y un insulto a
ostentando la insignia del collar de la
Majestad el Rey nunlos caballeros caroliReal y Distinguida Orden Española de Carlos III
ca se lo ha concedido en la boda de su hija en Carmona, el 13 de octubre de este año nos, ha sido pública,
a este Duque, por
y ha tenido gran diotra parte, su primo lejano.
fusión en los medios dedicados a la crónica de
sociedad.
Es decir: el Duque de Santa Elena se ha
puesto unas insignias que ni le corresponden, ni
En otros países mejor fundados en el
puede lucir. Porque no tiene derecho a ellas.
respeto a las leyes, un acto como este hubiera
merecido algo más que un reproche público:
¿Por qué ha hecho el Duque esta torpeza?
hubiese terminado en multa, o incluso en la cárcel.
¿Desprecia a Su Majestad el Rey? ¿Quiere
insultarle? ¿Se ríe de las leyes y de las autoridades
Lamentable, este es un hecho lamentable,
del Estado? ¿Se mofa acaso de la bicentenaria
que en nada engrandece a la Casa ducal de Santa
Orden carolina? ¿O se mofa de todos sus
Elena. Y tan grave, que a don Alfonso no le va a
miembros, esos sí digna y verdaderamente
quedar otro remedio que el de pedir perdón al Rey.
condecorados? ¿Puede ser que con esa insignia
O, de no hacerlo así, formalizar la inmediata
reservada a reyes y jefes de Estado, quiera el
renuncia a un Título y a una Grandeza de España
Duque hacerse pasar por un monarca reinante?
que, es evidente, no habría sabido ostentar con la
dignidad ejemplar que se requiere.
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [30]
REVISTA DE LIBROS
Santiago González Sánchez, LA
ALTA NOBLEZA CASTELLANA A
COMIENZOS DEL SIGLO XV.
CONSOLIDACIÓN DE LINAJES Y
CASAS NOBLES. Madrid, Comité
Español de Ciencias Históricas,
2018 (con la colaboración de la
Fundación Cultural de la Nobleza
Española, del Real Cuerpo de la
Nobleza de Madrid y de la editorial
Dykinson). ISBN 978-84-9148-9092. 334 páginas. Los linajes que integraban la alta nobleza de Castilla a
comienzos del siglo XV eran pocos,
desde un punto de vista cuantitativo, y eran menos aun los que ejercían los oficios de la corte y participaban en la administración del
reino. En los últimos años han proliferado los estudios sobre algunos
de ellos –por ejemplo, los excelentes del profesor Alfonso Franco Silva-, pero se echaba en falta una visión de conjunto cual es esta. Y es
que a su estudio en conjunto y en
profundidad dedica esta densa obra
el Dr. D. Santiago González Sánchez, profesor de enseñanza secundaria en Andalucía y autor de
otros estudios muy acreditados. A lo
largo del relato se trata de los parientes reales y de su influencia cortesana y política; de los nobles y las
Casas nobiliarias de la época, su
intervención en las misiones diplomáticas, su presencia en los órganos del gobierno monárquico y en
los oficios de la corte, y su injerencia en el gobierno de las ciudades.
El estudio de los linajes y Casas lo
acomete González Sánchez según
sus ámbitos territoriales: Galicia
(Castro, Sarmiento, Andrade, Sotomayor y Ulloa); Asturias, León y
Castilla (Quiñones, Osorio, Manri-
que, Enríquez, Velasco, Pimentel,
Arellano, Sandoval y Ayala); Toledo
y Extremadura (Mendoza, Ayala,
Acuña, Silva y Suárez de Figueroa);
Murcia (Fajardo, Sánchez Manuel);
Andalucía (Guzmán, Ponce de León, Ribera, Fernández de Córdoba,
Portocarrero); y otras regiones (Dávalos, Zúñiga). Unas atinadas conclusiones cierran este importante
estudio, complementado con un extenso aparato erudito, una bibliografía amplia y un índice de personas y lugares (MF).
Florentino Antón Reglero, ENFOQUE ANTROPOLÓGICO DE LA
HERÁLDICA MARÍTIMA. Madrid,
Real Academia de la Mar y Librería
Robinson, 2018. 46 páginas. El discurso de recepción del autor (capitán de la Marina Mercante y doctor
en Ciencias y Técnicas de la Navegación) en la Real Academia de la
Mar, leído en sesión de 22 de noviembre de 2018, se refiere a los
emblemas heráldicos relacionados
con el ámbito marítimo, pero examinados desde el punto de vista de la
antropología sociocultural, es decir
como un fenómeno social, y alejado de la mera observación de las
formas. Se auxilia el autor, para
acometer tal empeño, en la corriente de la historia de las mentalidades
desarrollada a partir de 1929 por la
escuela de los Annales gala. Antón
Reglero lleva a cabo, sobre tales
bases, una interesantísima aproximación al fenómeno heráldico no
desde las soluciones estéticas que
fue adoptando, sino desde el alma
de los protagonistas, esto es, de las
personas y de las entidades armígeras de la época bajomedieval,
que califica acertadamente de
aquel tiempo simbólico. Casos que
ejemplifica con las armerías de personas y de poblaciones cantábricas
ligadas a la mar, que incluyeron en
sus sellos y armerías navíos y embarcaciones, escenas de pesca,
instrumentos de navegación, útiles
de pesca, etcétera. Para concluir
defendiendo la existencia de una
heráldica marítima especial y específica, llena de contenidos propios y
de interesantes significados. Contestó este discurso, en nombre de
la Real Academia, el numerario don
Manuel Mª Rodríguez de Maribona
y Dávila, eximio heraldista, que vino a poner en valor las tesis de don
Florentino Antón Reglero (MF).
Charles A. Gauci, THE PEERAGE
AND KNIGHTAGE OF MALTA.
Malta, 2018. ISBN 978-99932-7688-3. 648 páginas con ilustraciones en blanco y negro. El Conde
Dr. Gauci (Malta, 1947), antiguo
médico militar británico y conocido
tratadista de los asuntos históricos
de la isla de Malta, nos presenta
hoy un grueso tratado que compendia toda la historia nobiliaria de la
célebre posesión de los caballeros
de San Juan, y que viene prologado, entre otros, por Mario Cutajar,
canciller de las Órdenes Nacionales
maltesas; por el Dr. Alfonso de Ceballos-Escalera y Gila, Marqués de
la Floresta, cronista de Castilla y
León; por Lord Lingfield, presidente
de la Imperial Society of the Kights
Bachelor. La primera parte está dedicada a la Nobleza titulada en Malta, su historia, sus títulos (marqués,
conde y barón), vigentes y extinguidos, el Committee of Privileges, los
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [31]
REVISTA DE LIBROS
grandes títulos feudales, las concesiones aragonesas, hispanas y magistrales, la situación de los antiguos feudos, las leyes sobre su
abolición, y la moderna legislación
republicana. Como apéndices, una
veintena de epígrafes sobre algunos títulos en especial, títulos extranjeros usados en las islas, un registro de investiduras, un examen
de la posición de los hijos segundogénitos en la nobleza maltesa, un
descentorium de la Casa Real de
Aragón hasta algunas familias maltesas, el elenco de los cardenales
malteses de la Santa Romana Iglesia, las relaciones de los barones
malteses con los pares británicos,
sus conexiones matrimoniales y familiares, las ascendencias maltesas
del Duque de Edimburgo, marido
de la Reina, y de la actual Duquesa
de Cambridge. Una sección aparte,
muy completa, se refiere a la presencia y residencia de títulos extranjeros en Malta, que se cierra
con una amplia referencia a la Association of Foreign Title Holders in
Malta. La segunda parte se refiere
a la nobleza maltesa no titulada, o
más bien a los caballeros malteses
de las Órdenes británicas, de las
Órdenes pontificias, de la Orden de
Malta, de la Venerable Orden de
San Juan británica, de la Johanniter
Orden germana, de la Orden Constantiniana de San Jorge, de la Orden del Santo Sepulcro, de la Orden saboyana de San Mauricio y
San Lázaro, de las Órdenes de Georgia, de la Orden de San Lázaro, y
de otras Órdenes Reales. La tercera y última parte de esta densa y
completísima obra se refiere al sistema republicano de honores, pre-
mios y condecoraciones, y al elenco de los condecorados con las Órdenes Nacionales maltesas y con
otras Órdenes de Estado extranjeras; así como al orden de precedencias. Un completísimo, inigualable y muy recomendable tratado
sobre estas materias nobiliarias y
premiales en Malta (LCE).
VV.AA., NOBLEZA E IMAGEN: LA
EXTERIORIZACIÓN DEL ESTATUS SOCIAL. Sevilla, Real Maestranza de Caballería de Sevilla y
Fundación de la Nobleza Española,
2018. 208 páginas, con ilustraciones bitonales. ISBN 978-84943766-7-2. El volumen recoge los
textos de las tres conferencias del
sólito ciclo anual organizado por
ambas instituciones, y coordinado
por el profesor Ramón María Serrera. Son las del propio Ramón María
Serrera, Condición nobiliaria y exteriorización de estatus (siglos XVII y
XVIII); Álvaro Recio Mir, Estufas,
furlones y carrozas: los carruajes
de la nobleza; y Bárbara Rosillo,
¿Cómo viste la nobleza? Indumentaria y estatus social. De gran interés son las tres aportaciones al estudio del more nobilium de la Edad
Moderna (MF).
Sylvie Ancelot, SUR LES PAS D’ISABELLE II, REINE D’ESPAGNE
EN ÉXIL À PARIS DE 1868 À
1904. París, 2018. ISBN 978-2-34315177-9. 262 páginas. La bibliografía de la Reina castiza es muy amplia, pero los treinta y cinco años
que ella pasó exiliada en París -casi
la mitad de su vida-, son un asunto
muy poco conocido y tratado, lleno
de contradicciones y de zonas de
sombra. A su estudio dedica la au-
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [32]
tora, que ha sido profesora en la
Escuela Diplomática de Madrid, esta interesante obra biográfica. Aparte de las muchas anécdotas, ese
periodo tuvo repercusiones directas
en la Historia española, por ejemplo
en cuanto a las relaciones hispanofrancesas. La visión de los sucesos
europeos e hispanos de la desgraciada pero siempre españolísima
soberana tiene por eso un interés
grande (MF).
María Jesús Fuente Pérez, VIOLANTE DE ARAGÓN, REINA DE
CASTILLA. Madrid, Dykinson,
2017. ISBN 978-84-9148-276-5.
278 páginas. La autora, profesora
de la Universidad Carlos III, añade
con este estudio un capítulo más a
la creciente corriente historiográfica
de la historia de las mujeres. Se refiere a una reina hispana poco conocida y poco tratada por los historiadores, a pesar de su notable
importancia histórica: Violante de
Aragón (1236-1300), hija de Jaime I
el Conquistador y de su segunda
mujer Violante de Hungría, fue reina
consorte de Castilla al casarse en
1252 con el grande Alfonso X el Sabio –merecedor, este sí, de numerosas biografías-. La autora trata en
primer lugar de la madre de la reina, para referirse en capítulos sucesivos a la persona de Violante, y a
su actuación política, concluyendo
con un examen de su legado histórico. Quedan en eviden- cia la devoción de Violante y su relación con
algunos monasterios; sus actuaciones políticas como mediadora en
las disputas partidarias y cortesanas; y el apoyo constante a sus nietos, los hijos del Infante Don Fer-
REVISTA DE LIBROS
nando de la Cerda. La bibliografía
manejada es amplia y oportuna, en
particular la europea, menos habitual y menos conocida. Con todo
ello, la autora logra rescatar para la
historiografía moderna la figura de
aquella notable reina castellana
(MF).
VV.AA., EL CUERPO DE LA NOBLEZA DE MADRID EN EL REINADO DE CARLOS III. Madrid,
2018. ISBN 978-84-09-00240-5.
302 páginas, con ilustraciones a todo color. Para conmemorar el tercer
centenario del nacimiento del Rey
Don Carlos III se ha preparado este
volumen. Obra colectiva, en exceso
ambiciosa -lo delatan las sedicentes y rimbombantes Comisión científica y Comisión técnica-, y como
tal de una calidad muy desigual;
máxime al haber acogido en sus
páginas, junto a las de personas
respetadas y respetables, colaboraciones de algunas personas de muy
dudoso more nobilium, sino declaradamente falsarios en cuanto sedicentes nobles, pero de fantasía.
Las ausencias -más bien exclusiones interesadas- son también clamorosas, y evidencian un trasfondo
de sectarismo insolvente, amparado por el presidente Vizconde de
las Torres de Luzón. Tampoco el
constante y desmedido tono hagiográfico hacia una de nuestras principales instituciones nobiliarias, produce buenos resultados científicos.
Entre los trabajos apreciables desde un punto de vista estrictamente
académico, notemos los firmados
por Fernando García-Mercadal y
García-Loygorri, Síntesis histórica
del Real Cuerpo de la Nobleza de
Madrid; Antonio Pau y Pedrón, Las
casas de la nobleza en el Madrid
del siglo XVIII; Marcos Fernández
de Bethencourt, El Estado Noble de
la Villa de Madrid bajo el reinado de
Don Carlos III; Carlos Nieto Sánchez, Los caballeros del Cuerpo de
la Nobleza de Madrid al servicio del
Rey Don Carlos III; José María de
Francisco Olmos, El Monte Pío para las viudas e hijos de los individuos del Estado de Hijosdalgo de
Madrid durante el reinado de Don
Carlos III; y Joaquín Martín Abad,
Patronos y capellanes del Cuerpo
de la Nobleza de Madrid. El volumen se concluye con un elenco de
los caballeros ingresados en el
Cuerpo entre 1782 y 1788. Un volumen que pudo haber sido estimable, pero que ha quedado muy
echado a perder por la insolvencia
de algunos coautores, y aún más
porque siempre será de lamentar
que los nombres de algunos impostores manchen a perpetuidad esas
páginas, y con ellas los nombres
del bicentenario Real Cuerpo, y del
inadvertido presidente Vizconde de
las Torres de Luzón (F de A).
Concepción Camarero Bullón y Félix Labrador Arroyo (dirs.), LA EXTENSIÓN DE LA CORTE: LOS SITIOS REALES. Madrid, Universidad Autónoma de Madrid, 2017.
745 páginas. ISBN 978-84-8344554-9. El auge de los estudios sobre la Corte es el origen de esta
obra colectiva que trata del espacio
físico de la Corona y del mundo
cortesano, tanto palaciego como rural, o sea del Patrimonio Real. Este
volumen, auspiciado por el Instituto
Universitario La Corte en Europa
(IULCE), comprende veinte estudios, entre ellos los debidos a Miguel C. Vivancos, En la vida y en la
muerte: estancias y sepulturas reales en San Salvador de Oña en
época medieval; Rafael Sánchez
Domingo, Fundación y dotación de
la Real Cartuja de Miraflores, privilegios y procesos; Ignacio Ezquerra
Revilla, Más allá de los Sitios Reales: la Corte como continuidad territorial; Virgilio Pinto Crespo, Los espacios de la corte, territorio y
jurisdicción: el Real Sitio de Aranjuez a mediados del siglo XVI; Rafael G. Peinado Santaella, Un Real
Sitio en la Vega de Granada: el Soto de Roma ... durante el siglo XVI;
Almudena Pérez de Tudela, El Alcázar de Madrid y los Reales Sitios en
la visita del duque de Saboya en
1591; Ana Marín Fidalgo, Los Reales Alcázares de Sevilla durante el
periodo habsbúrgico; Cloe Cavero
de Carondelet, Sobre la incorporación a los Sitios Reales de dos propiedades del cardenal Quiroga: la
Huerta de Fuente el Sol y el cigarral
de Altamira; Javier Pérez Gil, La
mudanza de la Corte y los Sitios
Reales vallisoletanos; Javier Cruz
Rodríguez, Una alternativa a los Sitios Reales: las visitas de Felipe III
como extensión de la corte; José
Manuel Barbeito, De Felipe III a Felipe IV: novedades en la tipología
de los espacios cortesanos; Laura
Oliván Santaliestra, La vida “real”
en los Sitios Reales (1651-1659):
jornadas y culturas del cuerpo; Fernando Marías, El Buen Retiro y el
Casón: nuevos dibujos, nuevas preguntas y respuestas; Félix Labrador
Arroyo, “La destrucción alhaja tan
preciosa...” Las visitas del gobierno
Cuadernos de Ayala 76 -OCT/2018 [33]
REVISTA DE LIBROS
del Soto de Roma en tiempos del II
Conde del Arco; Enrique Castaño
Perea, El espacio para la ceremonia en el Alcázar de Madrid: policoralidad, música y protocolo; Gloria
Martínez Leiva, Un palacio olvidado: Marracq, residencia en el exilio
de la Reina viuda Mariana de Neoburgo; Pasquale Rossi, Le residenze di Carlo e di Ferdinando IV di
Borbone: architettura e luoghi di
caccia; Eugenia Smoktiy, Los reales
sitios de la monarquía rusa en el siglo XVIII. Catalina II y su hijo Pablo;
Marta Isabel Sánchez Vasco, La
evolución del Soto de Aldovea y su
integración a la Corona como Real
Sitio; Enrique Martínez Ruiz, La seguridad de los Sitios Reales desde
los Habsburgo a Isabel II; Magdalena de Pazzis Pí Corrales, El Cuerpo
de Guardabosques en el siglo XVIII;
y Luis Urteaga y Concepción Camarero, De la Corte al Estado: la
cartografía de los Sitios Reales levantada por la Junta General de
Estadística (1861-1869). Una recopilación memorable (MF).
Marcelo Luzzi Traficante, LA
TRANSFORMACIÓN DE LA MONARQUÍA EN EL SIGLO XVIII:
LAS CASAS REALES DE FELIPE
V. Madrid, Polifemo, 2016. 656 páginas. ISBN: 9788416335176. El
análisis de la corte y, especialmente, de las casas reales de Felipe V
proporciona una reconstrucción de
las acciones del monarca desde
sus propios ámbitos de actuación:
el universo doméstico y político.
Permite, al tiempo, comprender que
fueron las reformas en las casas reales las que abrieron los procesos
de transformación y marcaron los
criterios de prudencia política con
que debían emprenderse las propias reformas. Las modificaciones
en la estructura de las casas reales
vinieron acompañadas de un cambio en la forma de gobierno de las
mismas, lo que unido a las transformaciones en el ceremonial de la
corte y a las diferentes disputas de
poder que se de- sarrollaron en
ella, evidencia los cambios en la
propia noción de corte y la preponderancia de las casas reales en la
constitución de la Monarquía. En
definitiva, las reformas de las casas
reales ayudan a comprender los
cambios y el rumbo de las transformaciones de la Monarquía hispana
de la primera mitad del siglo XVIII
(ED).
Juan Arnáiz de Guezala, LINAJE
DE YGUAL. FUENTES DOCUMENTALES. Santander, Centro de
Estudios Montañeses, 2018. 768
páginas, con numerosísimas ilustraciones y árboles en blanco y negro.
ISBN 978-84-938671-9-5. Juan Arnáiz de Guezala, artista pintor y dibujante, pero también notable investigador, es el autor de este
denso y extenso estudio sobre una
familia hidalga originaria de la Montaña, que tomó su apellido del barrio de Ygual, en Arnuero -Junta de
Siete Villas, Trasmiera-, y que se
expandió desde allí por los reinos
de Castilla y de Portugal, y llegó
hasta la América hispana –es muy
interesante la genealogía de la rama mexicana-. Ha dado esta familia
notables arquitectos, escultores,
canteros, retablistas, carpinteros y
doradores y, sobre todo, fundidores
de campanas. El estudio genealógico es muy completo, y del mayor interés porque toca también a otros linajes de fundidores de campanas
de la Trasmiera, como los Vélez de
Argos, los Rebollar, los Ballenilla,
los Ballado, los de la Mier, los Corrales, los Argos, los Gargollo –fundidores de las Obras Reales-, los
de la Verde, y otros. También trata
este estudio de los Guezala, descendientes de los de Ygual. La base documental manejada por el autor es exhaustiva, y notemos que
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [34]
Arnáiz no se limita a los aspectos
genealógicos, nobiliarios y heráldicos, sino que recoge y documenta
por menor las obras artísticas, repartidas por todas las Españas, de
aquellos maestros campaneros
montañeses, tan acreditados por
doquier en la Edad Moderna: de ahí
el gran interés que tiene este volumen para los historiadores del arte
(MF).
Enzo Modulo Morosini, LIBRO D’ORO DELLE FAMIGLIE NOBILI E
NOTABILE. L’Aquila, Michele Biallo
Editore, 2018. ISBN 978-88905379-1-2. 1028 páginas, con numerosas ilustraciones a todo color.
El autor divide esta extensa obra en
tres partes diferenciadas: la primera
dedicada al ordenamiento nobiliario
del Reino de Italia, aprobado por real decreto de 7 de junio de 1943; y
de su Consulta Araldica, organismo
colegial creado en 1869. La segunda parte comprende diversas monografías sobre templarios y templarismo (por el abogado Riccardo
Scarpa), sobre derecho nobiliario
del Sacro Romano Imperio Germánico (por el profesor Raffaello Cecchetti); sobre la Casa Granducal de
los Médici de la Toscana (por don
Ottaviano Beniamino de’ Medici di
Toscana di Ottajano); y sobre la
aristocracia revolucionaria napoleónica italiana al servicio del poder
(por el abogado Ranieri Roda), esta
con un extenso blasonario. La tercera parte, la más extensa, reune
un largo elenco de familias italianas
nobles, tituladas y no tituladas, y de
familias italianas distinguidas, con
un anejo Armoriale Storico Generale Italiano (LCE).
REVISTA DE REVISTAS
ESPACIO, TIEMPO Y FORMA. Serie III, Historia medieval, 31 (2018).
Dedicado al fallecido profesor don
Carmelo Luis López, este número se
abre con el sentido relato de Gregorio del SER QUIJANO, Profesor Dr.
Carmelo Luis López: in memoriam; y
se continúa, entre otros, con los de
Carlos BARQUERO GOÑI, Transferencias de recursos de la Orden de
San Juan desde España hasta el
Mediterráneo Oriental durante la
Edad Media; Margarita CABRERA
SÁNCHEZ, La muerte del príncipe
Don Juan. Exequias y duelo en Córdoba y Sevilla durante el otoño de
1497; Francisco de Paula CAÑAS
GÁLVEZ, Primogenitura, continuidad
dinástica y legitimidad institucional
en Castilla a principios del siglo XV:
Catalina de Trastámara, Princesa de
Asturias (1422-1424); Estefanía FERRER DEL RÍO, Rodrigo de Mendoza, I Marqués del Cenete y I Conde
del Cid: paralelismos entre su biografía y su pretendida genealogía; María Dolores GARCÍA OLIVA, Señores
contra campesinos: Un conflicto por
la tierra en Mirabel a finales de la
Edad Media y principios de los Tiempos Modernos (1488-c. 1520); Miguel José LÓPEZ-GUADALUPE PALLARÉS, Procesos de señorialización en concejos de realengo en
la Extremadura castellano-leonesa.
Un estado de la cuestión; Milagros
PLAZA PEDROCHE, La Orden de
Calatrava en la Baja Edad Media
(1350-1500): repaso historiográfico; y
Francisco ABAD NEBOT, De medievalistas ilustres. Entradas para un
diccionario (MF).
ESPACIO, TIEMPO Y FORMA. Serie IV, Historia moderna, 31 (2018).
En este número, monográfico sobre
el tema Los últimos consejeros de
Estado antes del cambio dinástico
(1699), aparecen, entre otros, los artículos de Rafaella PILO GALLISAI y
CHRISTOPHER STORRS, The last
Councillors of State before the Dynastic Change (1699); Luis Antonio
RIBOT GARCÍA, El IX conde de
Santisteban (1645-1716). Poder y
ascenso de una Casa noble a través
del servicio a la Corona; Rocío MARTÍNEZ LÓPEZ, Pedro Manuel Colón
de Portugal, duque de Veragua. Un
Consejero de Estado de Carlos II en
un territorio en disputa; Roberto QUIRÓS ROSADO, La construcción de
un cursus honorum diplomático en
tiempos de Carlos II: Francesco del
Giudice (1684-1700); David MARTÍN
MARCOS, A Distant Council, Nearby
Problems. The Duke of Medinaceli,
Naples, and the Unity of the Spanish
Monarchy, 1696-1702; y Héctor LINARES GONZÁLEZ, Al servicio de
Su Católica Majestad. La concesión
de mercedes de las órdenes militares castellanas a miembros del Consejo de Órdenes y del Consejo de
Castilla en el reinado de Felipe III
(MF).
TIEMPOS MODERNOS, 37 (2018).
Esta entrega comprende, entre otros,
los textos de Francisco José GARCÍA PÉREZ, La imagen del ministrofavorito en el púlpito regio durante el
reinado de Carlos II; Máximo DIAGO
HERNANDO, Francisco Frutos Río:
Un caso paradigmático de ascenso
social a través de la Mesta y la explotación ganado trashumante en el
siglo XVII; Álvaro PAJARES GONZÁLEZ, Formas de organización supralocal en la Edad Moderna castellana:
las juntas de tierra en las villas de
señorío palentinas y su lucha contra
la injerencia señorial; y José María
VIDAL VARGAS, Leonor Manrique
de Sotomayor, regente de los estados de los Medina Sidonia y monja
profesa en el convento de Madre de
Dios de Sanlúcar de Barrameda
(MF).
NOBILTÀ, 146 (septiembre-octubre
2018). Con un editorial dedicado a Il
mancato riconoscimento della nobiltà
e l’dentificazione personale, inserta,
entre otros, los artículos firmados por
Giorgio ALDRIGHETTI, Segni della
pietà religiosa; y Giacomo CERASOMMA, Come la nuova legge sulla
trasparenza rende accesibili i decreti
a fregiarsi di onorificenze straniere e
non nazionali (MF).
CUADERNOS DE HISTORIA MODERNA, 43/1 (2018). La revista de la
Universidad Complutense nos trae,
entre otras, las aportaciones de Ana
MARTÍNEZ MUÑOZ, Imagen nobiliaria y ficción renacentista: la memoria
linajística de la Casa de Benavente
en un libro de caballerías manuscrito; Juan Carlos RODRÍGUEZ PÉREZ, Los caballeros andantes y el
preceptor real. Libros de caballerías
en la biblioteca de García de Loaysa
Girón (1534-1599); y José A. LÓPEZ
ANGUITA, Al servicio de una nueva
reina: algunas consideraciones en
torno a la formación de la Casa de
María Luisa de Saboya (1701-1703)
(MF).
AVISOS DE LA REAL BIBLIOTECA, 85 (mayo-agosto 2018). Publica
este número dos relaciones inéditas
sobre un curioso suceso ocurrido a
la puerta de la Embajada inglesa en
Madrid el 21 de septiembre de 1621
(MF).
HISTORIA, INSTITUCIONES Y DOCUMENTOS, 45 (2018). De este número destacamos los trabajos de
Santiago GONZÁLEZ SÁNCHEZ, La
media y baja nobleza castellana durante la regencia de los tutores de
Juan II de Castilla, 1407-1418; Rodrigo J. FERNÁNDEZ MARTÍNEZ, La
escritura prehumanística en la Murcia bajomedieval: un estudio epigráfico de la 'explanatio clypei' del escudo de Chacón en la capilla de los
Vélez; Jesús M. GARCÍA AYOSO,
Poder y conflicto en un señorío atlántico castellano: el pleito del condado
de El Puerto de Santa María en los
inicios de la Edad Moderna (MF).
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [35]
GENTES DE BIEN
LA ACADEMIA PORTUGUESA DA HISTORIA OTORGA EL PREMIO GULBENKIAN AL
CONDE DE RÍO GRANDE
El Premio Calouste
Gulbenkian de Historia
Moderna y Contemporánea 2018, instituido por
la Academia Portuguesa da História, ha sido
atribuido a la obra O
Duque de Loulé – Crónica de um percurso político
(1804-1875), publicado en 2017 y del que nos hicimos eco en los Cuadernos de Ayala. Es su autor
el Dr. Dom Filipe Folque de Mendóça, Conde de
Río Grande, investigador del Centro de História da
Sociedade e da Cultura en la Universidade de
Coimbra. Reciba nuestra afectuosa felicitación por
tan merecido premio.
tos, el general Armando Díaz ha sido recordado y
celebrado en Roma, en la Biblioteca Militar Central del Estato Mayor del Ejército italiano. El encuentro ha sido intitulado La última batalla - Armando Díaz y su Ejército” Han sido presentados
aspectos inéditos de la vida del general napolitano
de origen español, nacido en 1861, de su compor-
tamiento atípico para la época como alto oficial, de
su desconocida y antigua genealogía. Han participado en las conferencias altos mandos de las
Fuerzas Armadas, muchos invitados y algunos estudiantes del Instituto Magistral Giordano Bruno,
de Roma. Presente también el viceministro de la
Defensa, el honorable Raffaele Volpi. Presencia de
excepción la de don Armando Díaz della Vittoria,
Duque de la Vittoria, nieto primogénito homónimo
del mariscal de Italia, acompañado por sus hijos
don Sigieri Díaz della Victoria Pallavicini, Príncipe
Pallavicini, y don Moroello Díaz della Victoria Pa-
ARMANDO DIAZ Y SU EJÉRCITO: LA ÚLTIMA
BATALLA
Después del ataque del 24 de octubre de
1918, concentrado en la zona de Vittorio Veneto,
durante la noche del 28 y el 29 y con la ruptura del
frente llevada a cabo por las fuerzas armadas italianas redibujadas por el general Armando Díaz, la
Primera Guerra Mundial concluyó con la victoria
del Reino de Italia. Después de la aparatosa retirada de sus tropas, el 4 de noviembre de 1918, el
Imperio Austro-Húngaro se rindió, seguido el 11
del mismo mes por el Imperio Alemán. Los Imperios de la Europa Central, presionados y vencidos
también en el frente occidental en Francia (por las
tropas ingleses, franceses y americanas), cedieron. Y exactamente el pasado 25 de octubre de
2018, a cien años de distancia de aquellos evenCuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [36]
llavicini. El amo de casa fue el general Salvatore
Farina, jefe del Estado Mayor del Ejército italiano.
En la mesa de los relatores, el profesor don Fabio
Cassani Pironti, Conde de Giraldeli, coordinador
del evento, que hizo una recostrucción inédita de
la genealogía de Díaz. Luego hablaron el profesor
mayor don Andrea Ungari, sobre la historiografía
GENTES DE BIEN
cisco Díaz, en 1741 era síndico de Porto Ercole ,
centro neurálgico del Estado de los Reales Presidios -una curiosa entidad territorial bajo la soberanía española y luego napolitana, protegida por una
serie de fortalezas-, vanguardia en Toscana de los
Borbones del sur. No cabe la duda de que este hijo de Cervantes y de Dante es uno de los más altos representantes del mundo mediterráneo (Giuseppe Grifeo di Partanna).
militar atinente a don Armando; el general don Fulvio Poli, que lo hizo sobre la reorganización del
Ejército en 1918; y el doctor don Federico Goddi
sobre Díaz como hombre y como comandante en
jefe. En la clausura intervino el profesor don Alfonso de Ceballos-Escalera y Gila, Vizconde de Ayala
y Marqués de La Floresta, jurista e historiador, cronista de Castilla y León, que narró la investigación
realizada en el Archivio Centrale di Stato, en Roma, sobre la concesión del escudo de armas a Armando Díaz, nombrado, después del conflicto, primer Duque de la Vittoria, por iniciativa del Rey
Víctor Manuel III. Una tradición familiar de pertenencia a las fuerzas armadas desde los tiempos
del Reino de las Dos Sicilias, y también de juristas y administradores. De ese modo, en el imponente salón de la Biblioteca, se escuchó la historia
de la familia Díaz, nombre tras nombre, en una secuencia genealógica nunca antes oída. Un duro
trabajo de investigación en los archivos de Nápoles, en los preciosos registros de las diócesis y parroquias que guardan los nombres de todos nuestros antepasados, en los de Porto Ercole y de
Pitigliano. El profesor don Fabio Cassani Pironti ha
pasado tres años de su vida profesional para llegar a este resultado. Hoy sabemos que don Fran-
LA CONDESA KATIA MELZI D’ERIL, EN LA
MAESTRANZA DE CASTILLA
En Roma, en la iglesia franciscana de Santa Maria della Concezione dei Cappuccini (en Via
Venetto), en la tarde del 25 de octubre de 2018,
ha tenido lugar el recibimiento de la Condesa Katia Melzi d’Eril en la Maestranza de Caballería de
Castilla. Dirigió la ceremonia religiosa, predicó y
bendijo las insignias el reverendo P. Ansaldo
o.f.m., y la presidió el Diputado Decano, Dr. Vizconde de Ayala, que tomó el preceptivo juramento
a la recipiendaria. La nueva dama maestrante fue
amadrinada por doña Adriana María Pérez de Venegas, hallándose presentes los caballeros maes
trantes doctor don Fabio Cassani Pironti, Conde
de Giraldeli, el Marqués Giuseppe Ferrajoli, el
Príncipe Guglielmo Giovanelli Marconi, el Príncipe
Carlo Massimo, el nob. don Antonino Lazzarino de
Lorenzo, el nob. Don Salvatore Olivari de la Moneda y el barón don Diego Spanò dei Tre Mulini. Asistió también el Marqués Giovanni Nicastro Guidiccioni. Seguidamente, los presentes visitaron el
célebre y estremecedor osario situado en la cripta
del templo, para después trasladarse al inmediato
y no menos célebre salón de los frescos del Grand
Hotel Palace, en donde la nueva dama maestrante
tuvo la cortesía de invitarles a todos a una rica y
animada merienda.
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [37]
GENTES DE BIEN
28 de marzo de 2018, a los 88 años de edad había nacido el 6 de abril de 1930-. Su casa, fundada en 1975 en la romana via dell’Orso 17, era
desde hace décadas una de las más acreditadas
de toda, y hoy la atienden sus hijos Gianluca y Roberta D.E.P.
LA HERÁLDICA MARÍTIMA, EN LA REAL ACADEMIA DE LA MAR
Como recordamos en las páginas que anteceden, el 22 de noviembre tuvo lugar en la Real
Academia de la Mar la lectura del dis curso de recepción del Dr. D. Florentino Antón Reglero, titulado Enfoque antropológico de la Heráldica marítima. Fue contestado, en nombre de la Corporación, por el numerario D. Manuel María Rodríguez de Maribona y Dávila, quien hizo la laudatio
del nuevo académico y glosó su obra y el asunto
de su discurso, al tiempo que le daba la bienvenida a la docta institución académica. Vaya nuestra
cordial enhorabuena al Dr. Antón Reglero por este
nuevo reconocimiento a su larga carrera académica y heráldica.
FALLECE EL MAESTRO GUCCIONE
Giorgio Guccione, maestro siciliano y propietario de la firma de su nombre, dedicada a la
artesanía premial, es decir a la fabricación de condecoraciones y medallas, ha fallecido en Roma el
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [38]
LA IMPERIAL ORDEN HISPÁNICA DE CARLOS
V, EN SEGOVIA
El 17 de noviembre celebró su reunión
anual la Imperial Orden Hispánica de Carlos V (de
la Sociedad Heráldica Española)), en el grandioso
Salón de Reyes del Alcázar, bajo la presidencia de
su Gran Maestre Don Enrique de Borbón y García
de Lóbez, y en presencia de varios generales y jefes del Arma de Artillería, y de numerosos maes
trantes de Castilla, cuya sede está en la ciudad
castellana. Allí fueron recibidos con la solemnidad
acostumbrada y previo el juramento preceptivo,
una treintena de nuevos caballeros y varias damas. Después de la ceremonia, la Orden y sus invitados se trasladaron a los salones del celebrado
restaurante Cándido, en donde tuvo lugar la sólita
y animada cena de hermandad, que resultó muy
grata.
GENTES DE BIEN
EL PREMIO MANUEL
CORCHADO, A DAVID HUIDOBRO
El jurado del Premio
para el Estudio de las
Órdenes de Caballería
españolas Manuel Cor
chado Soriano, instituido por la Fundación
Lux Hispaniarum (dependiente del Real
Consejo de las Órdenes de Caballería de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa), ha fallado otorgandolo en su quinta
convocatoria al joven historiador don David Huidobro Sanz, por su estudio El hábito de las cuatro
Órdenes Militares: un preciado honor con el que
los Monarcas hispanos han querido distinguir tradicionalmente a príncipes de otras Casas soberanas. Reciba Huidobro desde estas páginas nuestra calurosa felicitación por este merecido
galardón.
EL DUQUE DE VERAGUA EN LA REAL ACADEMIA DE LA MAR
El 10 de octubre pronunció su discurso de
recepción en la Real Academia de la Mar don Cristóbal Colón de Carvajal y Gorosábel, Duque de
Veragua, bajo el título Trascendencia global del
Descubrimiento de América, en el que glosó la importancia del hecho colombino, a su juicio incomparable con otros descubrimientos geográficos, ya
que afectó no solo a Europa y a América, sino a
todo el área del Pacífico, es decir a los países del
Lejano Oriente. Y fue el inicio de un enorme desarrollo social, cultural y económico globalizado,
de no menos enorme trascendencia para todo el
género humano. Contestó al Duque y le dio la
bienvenida, en nombre de la Real Academia, el
numerario don Juan van Halen y Acedo, presidente de la centenaria Asociación de Escritores y Artistas Españoles y secretario general de la Académie Belgo-Espagnole d’Histoire, ensalzando la
figura y obra del recipiendario, y poniendo en un
contexto actual la gran gesta colombina. Reciba
don Cristóbal nuestra afectuosa felicitación por el
gran éxito de crítica y de público que mereció su
docto discurso.
EL PROGRAMA JOVEN DE LA NOBLEZA TITULADA DE ESPAÑA
Tal es el título de una nueva iniciativa de
nuestra primera y principal corporación nobiliaria,
la Diputación de la Grandeza de España, que está
impulsada por el siempre activo diputado Duque
de Linares, y siguiendo la doctrina declarada por
S.M. el Rey en su mensaje de la Proclamación: no
es un hombre más que otro, si no hace más que
otro. El Programa Joven tiene como objetivo el de
valorar entre sus jóvenes la excelencia profesional
en el ámbito profesional, orientándoles, de manera
práctica y desde la excelencia y la ejemplaridad,
para afrontar mejor sus comienzos en el ámbito laboral. Así, las entrevistas, la formación en el extranjero, la preparación de concursos y oposiciones, o la creación de un negocio propio. Los
formadores serán Grandes y Títulos destacados
en su campo de actividad profesional, sea pública
o privada, y sea por cuenta ajena o autónomamente. A este efecto se organizarán cursos de calendario académico, con frecuencia mensual (nueve sesiones vespertinas), y asistencia presencial
in corpore, que tendrán lugar en la sede de la institución, calle de Ayala 3 (4º). La matrícula y reserva de plaza se cifra en 50 euros. El primer curso ya está en marcha este otoño, con sus
lecciones señaladas, y cuenta entre sus profesores al Duque de Linares, la Baronesa de Tamarit,
el Marqués de Vivola, el Duque de Terranova y el
Conde de Casa Galindo. Más noticias en secretaria@diputacióndelagrandeza.es.
Cuadernos de Ayala 76 -OCT/2018 [39]
IN MEMORIAM
ALEJO ARNÁIZ MARINA
(1955-2018)
Nacido en Madrid en 1955, ingresó en la
Academia General Militar de Zaragoza en 1974,
pasando después a la Academia de Artillería de
Segovia, de la que salió promovido a teniente de
Artillería en el verano de 1980.
En aquellos años segovianos le conocimos, iniciando una grata amistad.
Sirvió como tal, y como capitán, en el Regimiento de Lanzacohetes y como profesor de la
Academia de Artillería; y entre 1987 y 1993 en el
Regimiento de la Guardia Real, como jefe de la
2ª sección (Información, Protocolo y Relaciones
Públicas).
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [40]
Promovido a comandante en 1993, pasó a
la División de Inteligencia del Estado Mayor del
Ejército, hasta que en 1997 retornó a la Guardia
Real con el mismo destino que había tenido años
antes, es decir ocupándose de ceremonial y relaciones institucionales.
Durante los años de ese periodo profesional, se diplomó en Estudios Internacionales (Consejo Superior de Investigaciones Científicas); en
Protocolo y Ceremonial del Estado (Universidad
de Oviedo); en Genealogía, Heráldica y Nobiliaria
(Instituto Salazar y Castro); y en Heráldica, Genealogía, Uniformología, Vexilología y Música Marcial (Instituto de Historia y Cultura Militar). Era un
apasionado de la Historia hispana, y un voraz lector de libro y estudios atinentes a ella.
En 2001 fue nombrado director de Protocolo y Relaciones Públicas del Ministerio de Defensa (con el ministro Federico Trillo-Figueroa),
sirviendo allí hasta 2003, en que pasó a la Gerencia de Infraestructuras y Equipamiento de Defensa.
En 2005 fue nombrado asesor del Departamento de Protocolo, en la Secretaría General
de la Presidencia del Gobierno. Desde entonces,
se convirtió en la sombra del presidente Rodríguez Zapatero.
En 2014, siendo ya coronel de Artillería,
fue nombrado subdirector general de Protocolo y
Ceremonial del Estado, donde afianzó su crédito
como profesional de referencia en España, merced a su larga trayectoria en protocolo de Estado.
Durante su carrera, mereció ser comendador de las Órdenes de Carlos III, de Isabel la Católica y del Mérito Civil, caballero placa de la Real
y Militar Orden de San Hermenegildo, oficial de
las de Bernardo O’Higgins (Chile) y del Cedro (Líbano), y caballero de la del Mérito (Alemania).
Aunque padecía de una grave enfermedad desde muchos meses antes, su muerte inesperada, ocurrida el 17 de diciembre último, nos
ha dejado un sentimiento de pena muy grande.
España ha perdido a un gran profesional y a un
servidor leal de la Corona y del Estado; sus muchos amigos, a un amigo excelente, discreto y
bueno.
Descanse en paz.
El Dr. Vizconde de Ayala
Chopo 1
28023 Madrid
palafoxypezuela@gmail.com
UNA
CONDECORACIONES ESPAÑOLAS
COLECCIÓN EXCEPCIONAL DE ESTUDIOS HISTÓRICOS , INSTITUCIONALES Y PROSOPOGRÁFICOS
EL TRIUNFO DE UNA VOLUNTAD HISTORIOGRÁFICA DE SERVICIO PÚBLICO
TOISÓN DE ORO
P.V.P. 30 €
MARÍA LUISA
P.V.P. 20 €
SAN FERNANDO
P.V.P. 35 €
SAN HERMENEGILDO
P.V.P. 30 €
MÉRITO CIVIL
P.V.P. 20 €
MALTA
(AGOTADO)
ORDEN REAL
(AGOTADO)
MARÍA VICTORIA
P.V.P. 20 €
MARÍA CRISTINA
P.V.P. 20 €
ALFONSO XII
P.V.P. 20 €
REPÚBLICA
P.V.P. 20 €
MÉRITO NAVAL
P.V.P. 25 €
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [41]
V E R S O S D E H I S TO R I A Y T I E M P O
Soneto a la brevedad de la vida
¡Cómo de entre mis manos te resbalas!
¡Oh, cómo te deslizas, vida mía!
¡Qué mudos pasos tras la muerte fría
con pisar vanidad, soberbia y galas!
Ya cuelga de mi muro sus escalas,
y es su fuerza mayor mi cobardía:
Por vida, nuevo tengo cada día,
que el tiempo cano nace entre las alas.
Cuadernos de Ayala
Gaceta trimestral de información varia y miscelánea
sobre Historia institucional, Órdenes y condecoraciones,
genealogía y heráldica, Historia nobiliaria, iconografía,
ceremonial y protocolo
dirigida por el Dr. D. Alfonso de Ceballos-Escalera y Gila
CONSEJO DE REDACCIÓN
Dr. D. Félix Martínez Llorente (Universidad de Valladolid), Dra. Dª
Ana Belén Sánchez Prieto (Universidad Complutense), Dr. D. Juan
Van Halen (Universidad de Alcalá), D. Manuel Rodríguez de
Maribona (Academia Asturiana de Heráldica y Genealogía), Dr. D.
Luis de Cevallos-Escalera (Academia Melitense), D. José A. Dávila
(Real Academia de Toledo), Dr. D. Fernando de Artacho (Academia
Andaluza de la Historia), Dr. D. Luis Valero de Bernabé, Marqués de
Casa Real (Colegio Heráldico de España y de las Indias), Dr. D.
José Mª de Montells (Academia de Alfonso XIII), Dr. D. Antonio de
Sousa Lara, Conde de Guedes (Universidad de Lisboa), Dr. D.
Fabio Cassani Pironti, Conde de Giraldeli (Universidad Pontificia
Regina Apostolorum)
Edita Palafox & Pezuela S.L.
Chopo, 1 - 28023 Madrid - España
¡Oh mortal condición! ¡Oh dura suerte!
www.cuadernosdeayala.es
sin temor de si quiero ver mi muerte!
En este número:
[2-4] Editorial: Notas legales acerca de la hipotética revocación de los Títulos franquistas, por
el Dr. Marqués de la Floresta
[5-9] Ávila de los caballeros y de los santos, por D.
Alfonso de Figueroa y Melgar, Duque de Tovar
[10] Cuarenta y más refranes de nobles e hidalgos, por el Dr. D. Luis de Cevallos-Escalera y
Gila
[11-13] El enigma del sepulcro de un supuesto embajador español en la isla de Sheppey, sobre
el Támesis, por el Dr. D. Alfonso de CeballosEscalera Gila, Vizconde de Ayala
[14-18] Alessandro La Marmora: appunti familiari,
genealogici e araldici, por el Prof. Dott. Fabio
Cassani-Pironti, Conde de Giraldeli
[19-29] Vida y fortuna de don Juan Manuel Manzanedo y González, I Duque de Santoña y I
Marqués de Manzanedo, gran hombre de negocios y gran filántropo (1803-1882), por D.
Rafael Portell Pasamonte
[30] Una torpeza del Excmo. Sr. Duque de Santa
Elena, por el Dr. Marqués de la Floresta
[31-34] Revista de libros
[35] Revista de revistas
[36-39] Gentes de bien
[40] In memoriam: Alejo Arnáiz Marina
[42] Versos de historia y tiempo: Soneto a la brevedad de la vida, por don Francisco de Quevedo y Villegas. Decir tomado del Quijote
¡Que no puedo querer ver el mañana
Cualquier instante de esta vida humana
es un nuevo argumento que me advierte
cuán frágil es, cuán mísera y cuán vana.
Francisco de Quevedo y Villegas
(Madrid, 1580-1645)
Mira, Sancho: si tomas por medio a
la virtud y te precias de hacer
hechos virtuosos, no hay para
qué tener envidia a los que
padres y agüelos tienen príncipes
y señores, porque la sangre se
hereda y la virtud se aquista,
y la virtud vale por sí sola
lo que la sangre no vale.
Miguel de Cervantes SAAVEDRA
(1547-1616)
en “Don Quijote de la Mancha”
capítulo XLII
Cuadernos de Ayala 76 - OCT/2018 [42]
Descargar el documento (PDF)
CAyala-076.pdf (PDF, 7.3 MB)
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