EN ESTOS TIEMPOS DE LA TIERRA Noviembre de 2015 PDF.pdf


Vista previa del archivo PDF en-estos-tiempos-de-la-tierra-noviembre-de-2015-pdf.pdf


Página 1...3 4 567178

Vista previa de texto


Cada cual se encuentra frente a ciertas situaciones exteriores pero - sean cuales
sean estas situaciones exteriores - ellas solamente están ahí para recordaros que
la solución está dentro vuestro a partir del momento en que reconectáis con la
humildad y la simplicidad, a partir del momento en que aceptáis no ser más que
polvo pasajero en esta Tierra, a partir del momento en que la Eternidad se
convierte en la finalidad de vuestra vida. Y aquella finalidad no está lejos ya que
está dentro vuestro.
No se trata pues de fe ciega sino más bien de una fe nueva, derivada de la
experimentación de ciertos estados contrarios dentro vuestro, con lo que se
explican las palabras del Comendador diciendo que – frente a cada situación –
solamente son dos las opciones: el miedo o el Amor. El camino del miedo os
conducirá siempre a manifestar vuestra posición en este mundo llevándoos a
perder de vista – como ocurre con muchos hermanos y hermanas – la esperanza,
la Eternidad, la Unidad.
Salta a la vista, sea cual sea el país donde estáis, que hay dos humanidades: una
relacionada con la Eternidad con plena conciencia o parcialmente inconsciente y
otra parte de la humanidad que está instalada en la ilusión del placer, sea cual
sea su expresión en este mundo, instalada en lo fútil, en lo agradable por cierto
pero que no dura jamás, por un lado y, por el otro, la imperiosa necesidad de
vivir el Amor despojado de todo dogma, de toda creencia, de toda proyección o
anticipación hacia cualquier futuro que sea.
En resumen, sea lo que sea lo que hayáis podido vivir hasta ahora, en cualquier
ámbito de vuestra vida, en cualquier ámbito de lo que llamáis « energía »,
« vibración », la vida os conduce siempre, mediante la gracia del Amor y de la
Luz, a iluminar de manera diferente la pantalla de vuestra conciencia. Y os
recuerdo que aquella iluminación no tiene sino un solo propósito: hacer que
viváis la gracia del Llamado de María sin resistencia y con toda confianza.
Así es la Vía de la Infancia, una confianza permanente. Sean cuales sean las
circunstancias, las alegrías, las vicisitudes, los sufrimientos incluso que padecéis
en el seno de vuestra vida, éstos pasan a ser relativos y se difuminan incluso tan
pronto como acogéis el Amor, mediante la gracia del Amor. En eso está mi
presencia hoy, consistiendo en ayudaros a interiorizaros más y más hasta
reuniros con Cristo, reuniros con la Verdad, aquélla que no está afectada con
5