Elecciones al Parlament Catalunya 2015 (1).pdf


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próximas a Satanás que al mensaje de Cristo. Hay que tener presente también
que la Iglesia española cometió verdaderas atrocidades y con más extensión
de tiempo y crueldad que en el resto de Europa.
Tampoco hay que olvidar que en España, en ciertas instituciones católicas y
religiosas, como los hogares Mundet en Cataluña, se internaba a los niños de
"los rojos fusilados y los hijos de las solteras y/o las prostitutas", quienes
tenían que pasar un mal trago que duraba más allá de la mayoría de edad.
Hace unos pocos días, un documental en TV3 llamado "El internats de la por"
presenta a unos testigos reales, que no han sido inventados y que son prueba
de la crueldad del sistema franquista y religioso del momento (y que aún
continúa a "fuego lento" dentro de una Constitución pseudo-democrática).
Fueron violados, torturados, sodomizados, prostituidos, vendidos a quienes les
esclavizarían, y todo ello en nombre de Jesucristo, otra gran controversia para
los de la sotana y sus seguidores.
Y no hablemos de una monarquía española que aglutina a un colectivo militar y
a una serie de partidos políticos (PP, UPyD, Ciutadans en Cataluña y
Ciudadanos en España, etc.) enquistados en la misma ideología que defiende
a esa misma monarquía, ya caduca y anacrónica, y a esas fundaciones que he
mencionado anteriormente. Entonces, cómo no va a ser centralista el PP, un
partido de derechas fundado por franquistas, al cual lo votan el clero, el
ejército, la Guardia Civil, la Policía Nacional, la patronal, las clases pudientes,
los monárquicos, los aristócratas y los franquistas, claro.
Por otro lado tenemos a los grandes empresarios (la gran Patronal), los
empresarios medianos y los pequeños empresarios. Todos ellos profesan una
ideología capitalista que les orienta hacia el Partido Popular, que es una partido
de derechas, conservador y con ideología capitalista y neo-liberal, en la que la
explotación laboral forma parte importante del contenido gracias a los grandes
beneficios que éste aporta a los capitalistas a corto plazo. La reforma laboral, el
despido, casi gratuito, la reducción del salario mínimo y otros recortes de los
derechos laborales son un caramelo para el empresariado. Unos sueldos bajos
harán "más competitiva" la producción de artículos para su exportación; más
dinero que va a parar a los bolsillos de los súper-empresarios y que puede
desaparecer, en una gran parte, en trámites de exportación, por mucho que
digan los Incoterms con referencia a los Créditos Documentarios que se
extiendan entre Exportador e Importador y a través de sus respectivos bancos.
Pero quien realmente va a "pagar el pato" es el pequeño empresario (0 a 3
trabajadores), ya que unos sueldos bajos disminuyen el poder adquisitivo de
los trabajadores/as, es decir: cuanto menos ganen, menos comprarán -como ya
dije antes-con lo que el consumo interno baja ostensiblemente y ello se ve en el
PIB, y al final el empresario pequeño acaba arruinado, sin poder pagar los
autónomos, ni liquidar las deudas con sus proveedores, ni tampoco pagar los
precarios sueldos de sus trabajadores. Todo ello conlleva una precarización de
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