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El placer de la pintura al óleo: ni acuarela, ni gauche, ni acrílico, ni pintura
infantil. ¡Sin embargo, son todos divertidos!
¿Qué imagen te viene a la mente cuando escuchas las palabras "pintura al óleo"? ¿La Mona Lisa con su piel
brillante y las montañas azules para enmarcar su cara? La Vanitas holandesa, sigue viviendo de la mortalidad y el lujo
secular (o en otras palabras, los cráneos humanos junto a las joyas)? ¿O es una obra de Jackson Pollock, esas rayas
voladoras de pinturas? La lista de obras famosas creadas por la pintura al óleo no tiene fin.
Como pueden ver, la pintura al óleo es un medio de pintura amado por los artistas profesionales debido a su
versatilidad, su lento secado y su calidad luminosa. ¡Bueno, esas son cualidades que nosotros, los no profesionales,
también podemos amar! Hoy en día, vamos a averiguar por qué la pintura al óleo es genial y por qué puede ser algo que
quieras probar.
En primer lugar, la versatilidad. La pintura al óleo es la más versátil de todas las pinturas, y gran parte de ella proviene
de la amplia gama de consistencia y viscosidad que puede tener. La pintura al óleo se hace tradicionalmente con
pigmentos y aceite de linaza, y cuando se exprime directamente del tubo, tiene una agradable y pesada textura
cremosa (el espesor de la pintura depende de la cantidad de pigmento en suspensión, sin embargo. Las pinturas con alto
poder de tinte tienden a ser más gruesas). Al mismo tiempo, la pintura al óleo puede ser diluida para que se vuelva tan
fina como las pinturas de acuarela. Esto se hace normalmente a través de disolventes de pintura.