Un MBA te ayudará a gestionar los riesgos,
habilidad esencial en una negociación, para
llegar a compromisos formales, aunque exista
cierto nivel de incertidumbre asumida.
Además, fomentarás las negociaciones en las
que se da una relación mutua de beneficio,
para que la otra parte se sienta satisfecha y
pueda establecerse una relación sólida y duradera.
Por otra parte, las habilidades de liderazgo
que lograrás adquirir con una MBA te posicionarán de manera excepcional para reconocer
y ver claramente la misión y el posicionamiento de la empresa. Tendrás que mantener esta
visión transparente para los demás miembros
de la organización, mantener esta idea atractiva para los clientes y diferenciarte frente a la
competencia.
Conseguirás mayores capacidades de adaptación y planificación. Tu habilidad de liderazgo
se verá reflejada en la posibilidad de analizar
las situaciones de negocio, planificar ajustes
para adaptarte a los cambios y mantenerte
siempre en juego con tus competidores.
Para optimizar tu liderazgo, un MBA te resultará útil para reconocer el talento y posibilitar el
desarrollo personal de tu equipo. Esto insituirá
el equilibrio perfecto entre la capacidad de la
persona y el puesto que ocupa.
Experimentarás la administración de información para que sea repartida por toda la organización, fomentar el flujo de ideas y, consecuentemente, la creatividad y la innovación.
Estas son solo algunas de las habilidades de
liderazgo que adquirirás o perfeccionarás con
tu formación, pero quedan en el tintero otras
muchas (establecer metas y objetivos, manejar situaciones de conflicto, fijar prioridades,

motivar, inspirar, etc.) que podrás desarrollar hasta
que resulten productivas.

Reputación y credibilidad
La formación de un MBA puede aumentar sensiblemente tu credibilidad y reputación a la hora de
buscar sinergias como emprendedor o ser contratado por una empresa.
Conseguirás una mejor reputación frente a los clientes o proveedores con los que trabajas y frente a tus
fuentes de financiación.
Actualmente, la formación a través de una MBA está
comprometida con la educación de profesionales
que no sólo buscan maximizar la financiación, sino
trabajar por una economía global más justa, respetuosa y sostenible.
Esto no solo te beneficia como individuo, sino que
beneficia a tu organización porque ayuda a construir la reputación de tu marca como de tu empresa.
Puedes elegir entre realizar un MBA específico que
refuerce un ámbito de conocimiento especializado
(finanzas, recursos humanos…) en el que has detectado carencias o bien un MBA generalista te forme
sobre la puesta en marcha desde cero de un negocio rentable.

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