PP, PSOE y C's, la gran estafa política (1).pdf


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Texto denuncia referente a las elecciones del pasado marzo 2016
De hecho el Sr. Aznar ya había iniciado unos años antes una campaña para la "liberación de la Ley
del Suelo" que dio lugar a la "burbuja inmobiliaria" y que no era más que un pretexto para el
futuro enriquecimiento de unos pocos. Sí que era verdad que había necesidad de viviendas debido a
una creciente juventud que necesitaba un techo para independizarse. Pero las cosas se hicieron mal
para los destinatarios de las viviendas y muy bien para los sinvergüenzas de turno: constructores,
promotores y los bancos; éstos últimos los máximos beneficiarios de la gran estafa que los
gobiernos "peperos y socialistas" hicieron posible gracias a la Ley Hipotecaria (LH); una ley que
permite que los bancos puedan quedarse con la propiedad hipotecada si no pagas el préstamo +
intereses elevados (hasta aquí casi normal), pero encima les permite reclamar el resto del préstamo
por pagar, aún cuando la propiedad embargada ya está en sus manos. Los recientes movimientos
de la plataforma de afectados por la hipoteca (PAH) ha hecho posible, en algunos casos, la renuncia
de algunos bancos a reclamar una deuda dos veces (es decir, deuda + la propiedad + quedarse las
cuotas ya pagadas + el 20% de entrada que fija la LH).
No obstante, se siguen produciendo desahucios de personas que lo han perdido todo y aún deben
lo que no tienen. Pero el PSOE, supuesto defensor de los derechos de los trabajadores según su
fundador, no hace nada, ni siquiera protesta. Pero cómo va a protestar contra unas prácticas que les
benefician a ellos mismos y que vemos en las continuas "puertas giratorias" que encuentran en su
carrera política. Uno llega a la conclusión de que la política no es el ejercicio del poder en favor de la
ciudadanía, sino más bien el ejercicio de la corrupción en favor de los corruptos. El PP tiene tal
cantidad de corruptos que no se entiende cómo se le sigue votando; quizás la respuesta menos
comprometida es que hay muchos ingenuos en este país que aún se creen a un partido que ha
llevado a este país a una miseria económica que no podrá resolverse ni en 30 años, y aún cuando le
condonen el 60% de la deuda exterior. El PSOE también tiene mucho que callar. El escándalo de los
ERE andaluces vinculado a dirigentes del PSOE de la Junta de Andalucía son un claro ejemplo de
que ni siquiera hay "trigo limpio" en un partido que se jacta de honradez política según sus fueros.
Por no hablar del fraude de las ayudas europeas a Andalucía gestionadas por esa misma junta
andaluza.
Durante el intento de formar una coalición que permitiese al Sr. Sánchez su envestidura como futuro
presidente del gobierno, al PSOE no se le ocurrió otra cosa que formar coalición con Ciudadanos
(C's); un partido de claras intenciones derechistas y conservadoras que bebe de las aguas que
manan de la ideología de organizaciones como la CEOE y la banca, es decir, las mismas aguas que
bebe el PP. Entonces, cómo es posible hablar de un cambio, o de un gobierno progresista, si pactas
con un partido conservador que no derogaría la reforma laboral del PP. La reforma laboral permite la
sobreexplotación laboral, maximizando los privilegios económicos del patrono en detrimento de los
derechos laborales del contratado. Si explotas al trabajador, le conduces a la precariedad laboral,
que deriva hacia la precariedad adquisitiva que impide el desarrollo comercial del intercambio o
transacción propuesto por Ray Dalio en su enfoque sobre cómo funciona la "máquina de la
economía".
Tampoco la imagen del Sr. Albert Rivera está libre de la caquita fascista de un pasado no muy
lejano cuando se le ve en fotos con un saludo "a tres dedos", muy típico de la juventudes hitlerianas.
De hecho, de joven perteneció a Nuevas Generaciones del Partido Popular, lo cual explica
muchas cosas. También cuando vemos a Jordi Cañas, su ex compañero de partido (apartado por
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