Colegio de la Universidad Nacional de La Pampa –ciclo lectivo 2016
Comunicación Institucional y Comunitaria

El deporte
El espectáculo
Son instituciones que a su vez se derivan en múltiples y muy diversas instituciones o
prácticas institucionales. Pensemos por ejemplo en el arte donde los artistas pueden colegiarse o
agruparse por corrientes estilísticas o por pertenencia a una forma de concebir la relación
arte/realidad (crítica, arte por el arte, revolucionaria, esteticista/experimental).
Además aparecen los llamados circuitos artísticos: museos, salas o salones de exposición
y/o exhibición, patrimonio público, circuito cultural y turístico, centros culturales, arte callejero.
También implican acciones específicas: grupos de trabajo, simposios, participación en eventos,
muestras, talleres, congresos, etc., políticas de fomento artístico.
También participan de distintos modos de producir y difundir la actividad: mercado del arte
(marchands), venta de espectáculos artísticos, programas e intervenciones con o sin fines de lucro,
donaciones de obras, etc. Es decir, cada institución se materializa en una serie de prácticas,
costumbres, normas y reglas, hábitos y convenciones dichas y no dichas, procesos de gestión de un
saber, de producción de un producto o servicio, etc.
Asimismo requieren de unas normas de
funcionamiento interno y otras para proceder con respecto a los públicos externos. Para ello, cada
institución planifica (sistemáticamente o informalmente) una serie de medios o canales de
comunicación, tanto para los actores institucionales internos o los públicos (clientes, usuarios,
audiencias, participantes, beneficiarios, etc.)
Así las instituciones tienen normas y reglas de funcionamiento:
Unas veces explícitas, es decir, intencionalmente visibles y comunicables: Estatutos,
reglamentos, códigos y normativas, pautas de funcionamiento, protocolos, misiones y visiones,
acuerdos y convenciones, prescripciones y fórmulas, tareas regladas, manuales de procedimiento,
prohibiciones o restricciones a espacios y lugares, pautas de convivencia, políticas de participación,
criterios de funcionamiento, jerarquías establecidas por organigrama, etc.
Otras veces, estas convenciones pueden ser no dichas o implícitas: saber quién posee el
poder, con quién relacionarse, quién queda afuera, quiénes funcionan como chivos expiatorios,
rumores de pasillo, saber hacer en la práctica, normas no dichas pero por todos reconocidas y
respetadas, alianzas y acuerdos sin firma, traiciones, arreglos por debajo de la mesa, solidaridad o
auxilios mutuos, formas de agrupación no rubricadas, filiaciones personales o grupales,
procedimientos no escritos, modos de valoración, modos particulares de conducta y
comportamiento permitidos, aceptados, rechazados, resistidos, etc.
Para que quede claro: está lo dicho y “
en principio”por todos “
respetado”
. Pero combinado
con lo anterior, está lo no dicho, lo que actúa por debajo, lo que todos saben pero no puede ser
reconocido formalmente, lo que implica tener cintura, adecuarse, moverse como“
pez en el agua”
Por otra parte tenemos medios y canales de información, difusión y comunicación que
sirven a los fines internos y externos.
Así, si una institución publica en medios de comunicación social o utiliza medios electrónicos
para comunicarse con otras organizaciones, o por carta con clientes o beneficiarios de un programa,
o mediante un sitio web institucional, papelería, o por publicidad en vehículos o vía pública, revistas

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